El presidente de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ), Juan Antonio Sánchez Quero (PSOE), exigió que se cumpla la Ley de Memoria Histórica para que los fusilados «dejen de estar tirados en las cunetas».
El dirigente socialista lo expresó ayer durante el homenaje a las 14 víctimas de la institución que fueron asesinadas durante la Guerra Civil.
Representantes de todos los partidos políticos de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) realizaron ayer una ofrenda floral como homenaje a los ocho diputados y seis trabajadores de la DPZ que fueron asesinados durante los primeros meses de la Guerra Civil.
El acto tuvo lugar en el memorial del jardín del palacio de Sástago de Zaragoza y sirvió como continuación al que se hizo en enero del año pasado tras descubrir una placa de cerámica de Muel con los nombres de los 14 fusilados y que contó con el consenso de todos los grupos políticos, según informa la institución en nota de prensa.
Durante el homenaje, Sánchez Quero subrayó la importancia de «honrar a todas las víctimas», un gesto que empieza «borrando del callejero, y con ello de nuestra memoria, todos los nombres y símbolos que siguen recordando a las personas y los hechos que cortaron vilmente las libertades de este país».
En este sentido, el presidente recordó que, a petición del grupo En Común (Podemos e IU), este año la DPZ ha creado un plan de ayudas para las asociaciones que trabajan por la recuperación de la memoria histórica dotado con 150.000 euros.
Asimismo, al finalizar el acto, se procedió al borrado, solicitado por el grupo En Común, de la placa franquista que presidía la fachada del Palacio Provincial.
En esta, según han detallado dichas fuentes, podía leerse la inscripción «1937 segundo año triunfal. La Excma. Diputación Provincial ofrece este recuerdo perenne de su lealtad a la patria y de su amor a la ciudad con motivo del glorioso alzamiento nacional contra el comunismo y en ocasión de dar el concejo a este lugar urbano el nombre de plaza de España».
Por todo ello, Sánchez Quero ha propuesto que, a partir de ahora, el jardín del palacio de Sástago pase a llamarse jardín de la Memoria en recuerdo de las víctimas de la DPZ.