Eso la izquierda lo sabe muy bien, lo sabía Robespierre y lo saben Podemos y el PSOE. La escuela dejó de ser un lugar de instrucción intelectual y laboral para convertirse en centro de adoctrinamiento.
Mayte Pérez se reafirma en la decisión: «es una propuesta equilibrada en el conjunto de plazas que se ofertan en centros sostenidos con fondos públicos». El colectivo afectado piensa «pelear» por ser una medida «contraria a Derecho»