Los ingresos obtenidos mediante los impuestos que pagan los aragoneses por consumir, por heredar o por su rendimiento en el trabajo han cosechado más de mil millones de euros para las arcas públicas. Y todo esto, en tan sólo cuatro meses del año 2017.

Según datos aportados por el Gobierno de Aragón, hasta el mes de abril han crecido los ingresos un 9,46% respecto al mismo periodo del año pasado. En total, en tan sólo cuatro meses, el Gobierno de Aragón ha ingresado 1.082 millones de euros por los tributos reconocidos.

Casi el doble de lo previsto en el presupuesto, según ha reconocido el ‘guardián’ de las cuentas públicas, Fernando Gimeno. El Consejero de Hacienda ha reconocido que los ingresos tributarios están muy por encima de lo establecido, lo cual, según Gimeno, hace prever que llegará al 100% de lo fijado en el presupuesto.


Publicidad


1.082 MILLONES

Los ingresos de los tributos que forman parte de la financiación autonómica como el IRPF o el IVA, han crecido un 7,17%, con 910 millones reconocidos hasta el mes de abril, mientras que los cedidos -entre ellos Sucesiones y Donaciones, Patrimonio, Transmisiones Patrimoniales o Actos Jurídicos Documentados- han subido el 27,93%, hasta 136,4 millones.

Los impuestos implantados por el Gobierno de Aragón, conocidos como ‘propios’, -grandes superficies, hidrocarburos o sobre la contaminación de las aguas- han crecido un 17,88%, hasta los 30,5 millones. Los casi 1.082 millones de euros de ingresos tributarios reconocidos representan una ejecución del presupuesto del 31,83%.

Según Gimeno, que ha presentado el balance de la recaudación tributaria del primer cuatrimestre está mañana, el aumento de ingresos permitirá disminuir el déficit. El Gobierno cree que se puede conseguir el objetivo del 0,6% para este año aunque haya que hacer algún esfuerzo, pero sin que sea necesario hacer retenciones presupuestarias.

EL IMPUESTO QUE ‘DIVIDE’

El Consejero de Hacienda se ha querido referir al impuesto de Sucesiones, un tributo que está siendo motivo de debate y queja por plataformas. Según los datos aportados por el Gobierno de Aragón, es el impuesto que más crece: un 48,99%, hasta alcanzar los 69,9 millones en cuatro meses. Un aumento, respecto al mismo mes del año pasado, de casi 23 millones.

El Director General de Tributos, Francisco Pozuelo, ha negado que el impuesto tenga afán recaudatorio. Según ha explicado, el aumento en los ingresos por el impuesto de Sucesiones se debe sólo al impacto de los cambios en la legislación, ya que también depende del número de herencias que se producen, del valor de las herencias y, sobre todo, de las actuaciones de investigación y lucha contra el fraude.

Además, el Director General de Tributos ha detallado que el 84,62% de las herencias en Aragón se producen entre parientes cercanos -cónyuges, descendientes y ascendientes-, y en el 90% de los casos no pagan nada, mientras que entre parientes más lejanos -hermanos, primos, tíos o sin parentesco- suponen el 15,38% de las herencias. También ha confirmado que en Aragón se rechazaron el año pasado el 7% de las herencias, por las deudas que en muchos casos conllevan.

Además, ha aludido a los 155.000 euros que se tienen que pagar en Aragón por una herencia de 800.000 euros que se ponen en muchas ocasiones como ejemplo y que «no llegan ni de lejos al 1%» de las herencias que se producen en la Comunidad».


Publicidad


Gimeno ha comentado que el impuesto de Sucesiones se está debatiendo en «profundidad» en la Comisión de expertos para la reforma del sistema de financiación, en la que hay acuerdo a favor de que exista el impuesto y de que haya un mínimo exento igual en todas las autonomías.

NO HAY VOLUNTAD DE SUPRIMIRLO

«No hay ninguna voluntad en las comunidades autónomas en estos momentos puesta encima de la mesa de la comisión de financiación autonómica para la desaparición de este impuesto«, ha remarcado el Consejero Gimeno. Al tiempo que ha remarcado que representa una fuente de ingresos importante para Aragón, pero, ha incidido, en que «mucho menos» importante que cuando gobernaba Luisa Fernanda Rudi (PP).

Gimeno también ha considerado que es «muy fácil» pedir la supresión de un impuesto, pero si bajan los ingresos «es muy difícil conseguir mantener los gastos» para sostener los servicios públicos. «Esto no cuadra», ha sentenciado.