Llega el mes de septiembre y con él, el comienzo escolar, y para muchas familias después de las vacaciones supone un gasto extra. Uniformes, libros, material escolar, ropa, calzado; todo un presupuesto que algunos padres no saben cómo afrontar. Se hablan de unos gastos altísimos, pero que con un poco de audacia se puede disminuir. ¿Cómo ahorrar en ese enorme gasto? Aquí algunos trucos.

La mayoría de los centros facilitan una lista con el uniforme, los libros, material que van a necesitar a finales de junio. Lo primero es no dejarlo todo para ultimo día y ser previsor, informarse y comparar precios. Hay dos meses para ello.

Muchos colegios tienen uniforme, es conveniente no comprarlo con el tamaño justo -ya que nuestro hijo irá creciendo a lo largo del curso-, además nos interesa que lo pueda llevar un par de años o más, eso sí, adaptándolo para que tu hijo no parezca un fantoche, se merece tener siempre una buena imagen, independiente de nuestro sistema de ahorro.

Este gasto el primer año puede ser alto pero los sucesivos ya no necesitará de todo, siempre hay algo que se puede aprovechar. También en muchos centros tiene un banco de uniformes de segunda mano que nos resultará más económico. Si tú centro no lo tiene, proponlo al APA.

Si tu hijo no lleva uniforme mi consejo es que desde pequeño le acostumbres a una ropa de colegio y otra de calle o paseo, y que te hagas con dos o tres conjuntos cómodos para ir a clase. Respecto al calzado, ahí sí que no miraría tanto el ahorro. Por su salud es importante un buen calzado que le sujete bien el pie, que no le sude, que sea cómodo y resistente al mismo tiempo. Tener en cuenta que lo van a llevar todos los días durante 7 horas, durante 9 meses, por caro que nos parezca al final salen baratos, más que los del fin de semana.

Los libros de texto interesa ver si hay alguno que te pueden prestar, sino comparar los precios tanto en las librerías de la ciudad como por en internet. Muchos centros están empezando a crear un fondo benéfico de libros usados en buen estado. Esta idea me parece estupenda, ya que ademas de ser un ahorro para las familias, ayuda a los alumnos a ser más cuidadosos con los libros puesto que luego tiene que servir para otros compañeros.

Respecto al material de papelería, como cuadernos, carpetas, mochilas, estuches, pinturas, etc; mi consejo es primero ver qué tenemos en casa, que es lo que podemos aprovechar antes de ir con la lista directamente a la tienda, no hace falta estrenar todos los años si están en buen uso.

Una vez que sabemos lo que necesitamos, comparar precios hoy en día suele haber buenas ofertas. Lo mejor es ir a comprar sin los niños ya que se emocionan y seguro que compráis más cosas de las que necesitáis y vuestro presupuesto se dispara. Es importante enseñar a nuestros hijos a hacer un buen uso del material y aprovecharlo bien.

Si necesitamos trasladarnos en medio de transporte para llevar a nuestro hijo al colegio, interesa hacer números según el número de niños tal vez sale mejor llevarlos en coche que en el transporte escolar. Otra buena opción es ponerse de acuerdo con otros padres que vivan cerca y hacer turnos para llevarlos bien en coche o en transporte público.

Estar atentos a las ayudas escolares, como becas de estudios, de comedor, etc; que ofrecen los centros o el gobierno: investigad y preguntad.

El incremento del «gasto base» de los hijos en el mes de septiembre depende de cada familia, de su forma de ahorrar o de consumir. Como madre intento que mis hijos valoren lo que tienen y lo que cuestan las cosas ayudándoles a que no sean consumidores por capricho.

*Cristina Gil es profesora y madre de familia, autora del blog Ideas para crear y disfrutar y del libro La Profe responde de editorial Palabra.