La ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, ha confirmado hoy el traslado a Huesca del cuartel general de la División Castillejos, una operación que desplazará a la capital altoaragonesa de 600 a 700 efectivos militares, entre mandos y personal de tropa.

La ministra ha hecho este anuncio en una breve visita a las instalaciones del acuartelamiento Sancho Ramírez de Huesca, cerrado a principios de año en aplicación de un plan de infraestructuras que previó su liquidación definitiva a causa de la crisis económica pero recuperado finalmente por Defensa.

Una visita que ha realizado junto al secretario de Estado de la Defensa, Agustín Conde, y el jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra, Francisco Javier Varela, y a la que han asistido el alcalde de Huesca, Luis Felipe, así como numerosos representantes políticos e institucionales de la Comunidad.

CERCA DE 700 EFECTIVOS

La ministra ha explicado que al cuartel general le acompañarán el batallón de la División Castillejos, una de las dos existentes en el país, otro no adscrito, un centro de comunicaciones y una unidad de servicios propia que pasará a denominarse Sancho Ramírez.

En total, cerca de 700 efectivos, más sus familias, cuyo asentamiento definitivo se prevé que se produzca en el horizonte de los años 2019-2020, una vez el Ayuntamiento de Huesca facilite los terrenos anexos al acuartelamiento para ampliar las actuales instalaciones militares.

En su alocución, la ministra, que ha solicitado guardar un minuto de silencio por los dos guardias civiles y un civil asesinados ayer en Albalate de Cinca (Teruel), ha resaltado la «especial vinculación» del Ejército de Tierra con la ciudad de Huesca como uno de los principales motivos del desplazamiento.

Ha subrayado, además, que la provincia de Huesca, por su ubicación en el territorio, es «un lugar muy destacado para la defensa nacional y la seguridad de todas las familias españolas».

Tras subrayar que la vinculación de Huesca con el Ejército de Tierra «está hoy más viva que nunca», ha señalado que Aragón se constituye en la tercera comunidad autónoma del país con mayor número de militares tras Madrid y Andalucía, y la mayor en proporción al número de habitantes.

SE TRIPLICARÁN LOS EFECTIVOS

La ministra ha agradecido la colaboración de todas las instituciones implicadas para llevar a cabo el plan de asentamiento del cuartel general de la División Castillejos, que permitirá «casi triplicar» los efectivos de que disponía el acuartelamiento oscense en el momento de su cierre.

En este sentido, ha valorado el compromiso del Ayuntamiento de Huesca de poner a disposición de Defensa una parcela de 80.000 metros cuadrados que se sumarán a los alrededor de 100.000 de que dispone el acuartelamiento para dar cabida a todas las fuerzas militares previstas.

El consistorio, que posee más del cincuenta por ciento de la parcela contigua, ha iniciado ya negociaciones con el resto de propietarios del suelo de la parcela para su adquisición y puesta a disposición del Ejército.

Cospedal ha asegurado que las actuales instalaciones del Sancho Ramírez pasarán a ser unas de las «más importantes» del país una vez esté el acuartelamiento a «pleno rendimiento», en el horizonte de los años 2019 y 2020, ha apuntado.

VERTEBRAR ESPAÑA

«El Ejército de Tierra vuelve con mucha fuerza a Huesca», ha subrayado la ministra, para quien la «excelente relación» tradicional existente entre ambas partes «ha propiciado el regreso».

En respuesta a preguntas de los medios de comunicación, la ministra ha comentado que no está prevista inicialmente ninguna conexión entre el cuartel general de la Castillejos con el aeropuerto de Huesca, ciudad de la que ha destacado sus buenas conexiones con las instalaciones aeroportuarias de Zaragoza y el AVE.

La responsable político, que ha preferido no adelantar los costes económicos del plan de traslado, ha añadido que la institución militar «también vertebra España».

Por su parte, el alcalde de Huesca, Luis Felipe, ha expresado su satisfacción y agradecimiento ante los planes de Defensa en relación con el acuartelamiento, y ha incidido en la voluntad del consistorio en potenciar servicios básicos en la ciudad como sanidad, educación y vivienda para acoger a las familias de los militares.