La sociedad aragonesa Pangaea Oncology, fundada en 2007 y presente en el mercado alternativo bursátil (MAB) desde diciembre de 2016, tiene la «vocación de buscar mejoras en la medicina personalizada», según su consejero delegado, Javier Rivela, que lidera la firma junto con el Presidente y Director Científico Rafael Rosell y los doctores Santiago Ramón y Cajal (sobrino biznieto del Premio Nobel de Medicina Santiago Ramón y Cajal) y José Antonio Maestre.
El principal foco de actividad de la empresa es el diagnóstico y tratamiento personalizado en la lucha contra el cáncer u oncología de precisión que realiza a través del Instituto Oncológico Rosell (100% propiedad de Pangaea); desempeño por el cual el Doctor Rafael Rosell fue recientemente elegido entre los 100 mejores facultativos de España en la lista Forbes, que tiene en cuenta más de una veintena de especialidades desarrolladas tanto en el ámbito público como privado.
Pangaea Oncology, controlada al 40% por la familia Solans, propietaria de Grupo Pikolin, aspira a aumentar su presencia en centros hospitalarios a lo largo del próximo año.
En la actualidad la biotech aragonesa centra su actividad en cuatro hospitales y su objetivo es estar presente en dos centros hospitalarios más en 2019. Este plan de expansión vendría acompañado de la apertura de nuevas oficinas en España.
Según los últimos resultados, la compañía incrementó sus ventas un 33,2% en el primer semestre del año, hasta 1,6 millones de euros, gracias a un aumento de pacientes y clientes de la industria farmacéutica.
Por divisiones, los ingresos por gestión asistencial aumentaron un 44,1%, mientras que los del área de diagnóstico molecular crecieron un 20,8%.