Hace casi 30 años que JCV Shipping ayuda a otras empresas en el transporte marítimo de mercancías. El origen de esta transitaria aragonesa se remonta a 1996, cuando se puso en marcha como negocio familiar. Desde siempre, su objetivo ha sido ayudar en sus operaciones logísticas de transporte marítimo a otras compañías para que éstas se puedan centrar en vender sus productos. Y así siguen, tres décadas después, desarrollando nuevas soluciones y creciendo para que sus clientes pueden hacerlo también.

Una de las novedades de esta puntera empresa aragonesa es que desde principios de este año está habilitada para ser un recinto aduanero. Esto significa que ahora, las mercancías que son de importación se pueden traer a Zaragoza directamente para ser despachadas en el puerto seco de JCV Shipping. De igual modo, si son exportaciones, se despachan en esta terminal aduanera y desde aquí se llevan a puerto para su posterior transporte marítimo.

«De esta manera, se gana agilidad en todas las operaciones aduaneras, porque si la aduana solicita la inspección del contenedor antes de ser despachado, en un puerto lleva más tiempo, porque hay más volumen de trabajo. Además, se ahorran costes, porque en Zaragoza son inferiores. Por otro lado, en terminales como la nuestra hay más comunicación y conocimiento por parte del personal aduanero, que pone mayores facilidades a las empresas tanto importadoras como exportadoras cuyas mercancías pasan por nuestro puerto seco», explica Óscar Calvo, director general de JCV Shipping.

Hasta que se concedió esta habilitación a la empresa este tipo de operaciones las realizaban en los puertos marítimos. «Ahora damos posibilidad a todas las empresas que quieran despachar de aduanas en Zaragoza de que lo hagan a través de nuestra terminal. De hecho, ya hemos empezado a realizar este tipo de operaciones con clientes habituales«, asegura Calvo. Con este avance, JCV Shipping funciona como ADT (Almacén de Depósito Temporal) y como LAME (Local Autorizado para Mercancías de Exportación), figuras aduaneras flexibles por las que se está apostando para dar agilidad a este tipo de operaciones internacionales.

JCV Shipping cuenta con una plantilla de 15 empleados, casi el doble que hace cinco años, cuando eran ocho. «En nuestro caso, el salto a la digitalización que dimos en 2018 sirvió no para eliminar puestos de empleo, sino para crear nuevos. Antes subcontratábamos los servicios informáticos y, desde entonces, tenemos nuestro propio departamento», explica Calvo, cuya empresa es un ejemplo de creación de empleo en Aragón.

En cuanto a sus clientes, la mayoría son empresas aragonesas o asentadas en la Comunidad, aunque también trabajan en La Rioja, Navarra o Cataluña. Además, hace cinco años, JCV puso en marcha una plataforma digital para trazar las mercancías hasta que llegan a destino y estar al tanto de las posibles incidencias.

Gracias a este avance, la transitaria puede ganar y fidelizar clientes. «El objetivo de este servicio es dar luz al transporte marítimo, que los clientes tengan el control total de sus embarques. Les dotamos de esta trazabilidad y les mantenemos informados de todo el proceso«, resume Calvo. Así, las empresas que tienen contratado este servicio reciben información en tiempo real sobre dónde está su mercancía.

Como trasfondo a todo, la misión de JCV Shipping es ser un transitario centrado en ofrecer servicios personalizados y de valor añadido para las empresas exportadoras e importadoras. «Frente a las grandes multinacionales navieras, que buscan cada vez más una integración vertical, dejando de lado el servicio al cliente, nosotros ponemos al cliente en el centro, aportando valor en base a nuestro conocimiento y a saber cómo funcionan las navieras para minimizar las incidencias y que el cliente solo tenga que preocuparse de vender su producto», explica el directivo.

En esta línea, la empresa acaba de presentar ‘Don´t worry, ship happy!’, un nuevo servicio dedicado a la asesoría y consultoría en el ámbito de la logística marítima.

*Nota del editor: Este artículo está incluido dentro de una línea de contenidos promocionados con empresas, instituciones y emprendedores con ADN ARAGÓN para poner en valor el compromiso, la identidad y el orgullo aragonés.