La Cruz de Mosul, proviene de la iglesia de Santa Simeona de Bartella en la diócesis de Mosul. Es una de las múltiples iglesias gravemente dañadas por ISIS (Estado Islámico): incendiada y profanada, que ahora está en reconstrucción.
La cruz forma parte de un Vía Crucis y tiene claras marcas de haber sido quemada. Para realzarla se ha ornamentado una Cruz de mayores dimensiones en la que va engarzada la cruz dañada. En los extremos de los travesaños horizontales, Alfa y Omega; en el travesaño vertical, el cordero cuya sangre cae sobre la cruz dañada y la cita: “Ama a tus enemigos y reza por los que te persiguen” (Mt. 5, 44), algo que los cristianos de Mosul ponen en práctica cada día y seguirán teniendo en mente cuando vuelvan a sus hogares destruidos por el oído, pero su amor será más fuerte.
LOS CRISTIANOS MASACRADOS EN IRAK
En 2014, ISIS (Estado Islámico) invadió Mosul y Nínive, en Irak, razón por la que 120.000 cristianos tuvieron que huir con lo puesto. Abandonaron todo para mantenerse fieles a Cristo. Durante este tiempo, Ayuda a la Iglesia Necesitada les ha apoyado económicamente, con alojamiento y alimentos; además ha escolarizado 15.000 niños refugiados.
A día de hoy, estos cristianos están empezando a volver, con mucha dificultad a sus poblaciones. Esta fundación pontificia está reconstruyendo más de 360 edificios de la Iglesia destruidos por el ISIS y más de 13.000 casas para que los cristianos puedan regresar.
Desde el 30 de octubre y hasta finales de noviembre, estará en Zaragoza (Basílica de Santa Engracia) esta cruz que va recorriendo España para concienciar, según los organizadores, que la Cruz es la única victoria de los cristianos y para mostrar el mensaje de perdón y de profunda fe de los hombres perseguidos en Irak.
Se puede visitar durante el horario de apertura de la Iglesia zaragozana, de 9 (cripta, el templo a las 10) a 14 h. y de 17 (cripta, el templo a las 18 h) a 21 h.