La Seo de San Salvador es una de las dos catedrales con las que cuenta Zaragoza. Situada en la plaza que lleva su nombre, pegada al Palacio Arzobispal y junto al lugar en el que se levantó el imponente Palacio de la Diputación del Reino, la Seo se levanta orgullosa en un conglomerado de estilos artísticos que recorren la historia del Reino de Aragón. No en vano, la Seo, además de centro religioso, también fue un centro de poder representativo, ya que allí se coronaban los reyes de Aragón. En el solar sobre el que se levanta la actual catedral de Zaragoza, el uso religioso ha sido el común denominador pese al paso de los siglos.

Ya allí se encontraba el templo y el foro de la Caesaragusta romana. Más tarde, con la llegada de los musulmanes, en el lugar se alzó la Mezquita Mayor de Saraqusta. Dentro de ese proceso de transformación que duró siglos hasta ver el edificio actual, se levantaron cinco naves y seis tramos cubiertos de bóvedas de crucería, otorgando al templo un aspecto casi cuadrangular. Gran parte de la responsabilidad del aspecto actual lo tienen los aragoneses de los siglos XV y XVI, y en particular, los arzobispos Alonso y Hernando de Aragón.

LA HISTORIA DE LA SEO DE ZARAGOZA

La Seo de Zaragoza

La fachada norte de La Seo concentra los elementos más antiguos / Turismo de Aragón

Tras la conquista de la ciudad por parte del rey Alfonso I El Batallador en 1118, Zaragoza se convirtió en la nueva capital del Reino. Y la Mezquita Mayor de Saraqusta se convirtió en la nueva catedral de la ciudad tras ser consagrada por el obispo Pedro de Librana un 6 de enero de 1119. Desde aquel momento, la vieja mezquita comenzó a transformarse lentamente, integrando el estilo románico en la estructura del templo islámico.

En 1166, siguiendo órdenes del obispo Torroja, se comenzó a construir el templo románico. Estaba orientado (aunque era muy extraño), hacia el norte, y tenía planta de cruz latina, con tres naves cubiertas con techumbre de madera, crucero, ábsides semicirculares y una nueva fachada. Las obras se prolongaron hasta 1198.

En este estilo, podemos observar los muros del exterior situados en el norte, con los ábsides de la cabecera que tanto nos recuerdan a los templos del norte de Aragón, con sillares de piedra, y ventanas en las que destaca el ajedrezado jaqués. Conformen pasaron los siglos, la vieja mezquita fue sustituida por nuevos elementos arquitectónicos de la que iba a ser catedral de la cabeza de la Corona. Tras las obras románicas, en el siglo XIII llegaron las obras para sustituir el templo románico por uno gótico.

La Seo de Zaragoza

Altar Mayor de la Seo, en alabastro policromado / Catedralesdezaragoza.es

Así, en los cuerpos superiores del ábside románico podemos admirar el añadido en estilo gótico mudéjar. En el interior del templo destacan en estilo gótico las naves y la cubierta del templo con sus pilares fasciculados y sus  bóvedas de crucería (un estilo que se mantuvo a lo largo de las sucesivas ampliaciones que se llevaron en la catedral hasta el siglo XVI). En estilo gótico también destaca la Parroquieta, donde se aloja el sepulcro del arzobispo don Lope Fernández de Luna y en el que también podemos disfrutar de una techumbre mudéjar. En el exterior de la Parroquieta destaca su espectacular muro mudéjar con la cerámica cromática, una de las obras cumbre del mudéjar aragonés.

En el siglo XV, se construyó el espectacular coro situado en el centro del templo, y el increíble retablo mayor, realizado en alabastro policromado por Pere Johan y Hans de Suabia por encargo del arzobispo Dalmau de Mur. De esta época también data la colección de tapices que en la actualidad puede verse en el museo instalado en la Sala Capitular. Bajo sus bóvedas, podemos contemplar una de las mejores colecciones de tapices europeos. Esta colección se remonta al siglo XV, cuando los arzobispos, imitando a la nobleza, empezaron a decorar sus casas y capillas con este elemento decorativo, dando origen a esta colección de más de 60 tapices de los siglos XIV al XVII.

Seo de Zaragoza

La colección de tapices de la Seo es una de las mejores del mundo / catedraldezaragoza.es

En el siglo XVI, en el momento en el que Zaragoza era conocida como la Florencia española, y con el Renacimiento plenamente asentado, llega la gran expansión de la catedral. Tras dos intentos fallidos (con derrumbes incluidos), se levantó el airoso cimborrio que hoy remata la Seo. En este siglo la catedral también se expandió en superficie, al ampliarse de tres a cinco las naves, ampliados dos tramos a los pies. Así, la catedral de la capital adquirió la planta de salón que podemos encontrar en la actualidad.

Entre los siglos XVII y XVIII, ya con la rivalidad desatada entre la Seo y el vecino Pilar, se derribó el viejo campanario de estilo mudéjar y se levantó una nueva y esbelta torre en 1704 de la mano del arquitecto italiano Giovanni Battista Contini, siguiendo los cánones artísticos del barroco

Con sus 90 metros de altura, dominaría sobre los tejados zaragozanos, dejando en evidencia al templo del Pilar, cuyas torres no se finalizaron hasta bien entrado el siglo XX. También en este siglo, concretamente entre 1763 y 1767, se diseñó la nueva fachada principal del templo, en estilo neoclásico, con sus columnas y su frontón. Fue obra de Julián Yarza, discípulo de Ventura Rodríguez.

LAS CAPILLAS, LEVANTADAS POR LAS PRINCIPALES FAMILIA ARAGONESAS

Seo de Zaragoza

Las principales familias aragonesas construyeron imponentes capillas / Catedralesdezaragoza.com

Como templo principal del Reino, y lugar de juramento de los Fueros y de coronación de los Reyes, arzobispos (muchos de ellos pertenecientes a la familia real aragonesa), además de las principales familias del Reino, aportaron numerosos recursos a embellecer la catedral para mostrar su devoción, pero también para mostrar su poderío. Al margen de las grandes obras estructurales emprendidas por distintos arzobispos, muchas familias nobiliarias construyeron hermosas capillas en los laterales de la Seo, mezclando alabastro, cerámica aragonesa, ricos metales, mármoles o yeso policromado.

Entre estas capillas, destacan por ejemplo la capilla de los Santos Miguel, Gabriel y Rafael (construida por orden de Gabriel Zaporta, constructor del palacio que acogió el patio de la Infanta), la Capilla del Nacimiento (fundada en 1587 por el infanzón zaragozano Jerónimo Ferrer Cerdán a modo de panteón familiar, y muestra su estilo renacentista en la portada en forma de arco triunfal), la Capilla de Santiago El Mayor (fundada en el siglo XVI por Juan de Alagón, Comendador de la Orden de Santiago, y reformada por el arzobispo Antonio Ibáñez de la Riva Herrera en 1695, ya en estilo barroco). Entre las capillas, también hay que mencionar por su belleza la capilla de San Pedro Arbués, inquisidor y canónigo de la catedral que fue asesinado delante del coro del templo en el año 1485.