En un viaje buscamos la experiencia única de lo que pocos conocen. Solemos recorrer miles de kilómetros para descubrir un templo hindú en Indonesia, una maravilla arqueológica en la Grecia más desconocida o, incluso, un pueblo indígena en lo profundo de Perú. Es lo que anhelamos: sentir que visitamos algo exclusivo, único y que está al alcance de pocos.

Pero para eso no hay que irse muy lejos. Aragón es un territorio tan vasto como diverso que congrega en toda su geografía los contrastes más exclusivos.

¿Te imaginas visitar el pueblo más pequeño del mundo con catedral? ¿Y hacerlo en una magnífica hospedería ubicada en la plaza mayor en un entorno medieval que inspira? Es fácil: sólo tienes que ir a Roda de Isábena (Huesca), uno de los pueblos más bonitos de España.


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Es un de los pueblos secretos que no se puede dejar escapar. Un lugar con un encanto único, trufado de historia medieval, y rodeado por tres sierras magníficas que dotan al municipio de un entorno con una extrema belleza. 

Y no sólo eso: Roda de Isábena es el pueblo más pequeño -con tan sólo doscientos habitantes- que cuenta con un templo catedralício. Se trata de la Catedral de San Vicente, la que también es la catedral más antigua de Aragón.

UN ENTORNO MEDIEVAL

En el Valle de Isábena se encuentra una de las poblaciones más sorprendentes de Huesca. Fue sede episcopal y capital del Condado de la Ribagorza. Sus calles medievales, sus rincones y plazoletas nos remontan a otra época. Cuenta con un gran número de obras artísticas, y una nutrida gastronomía que es difícil de olvidar.

La mejor opción para conocer el pueblo es instalarse en la Hospedería de Roda de Isábenaque se incluye en la oferta de la Red de Hospederías de Aragón.Se encuentra ubicada enfrente de la Catedral, en la Plaza Mayor, en un entorno medieval que inspira tranquilidad.

Está construida sobre los muros de la antigua abadía con una oferta de 10 habitaciones dobles que se completa con una cafetería y un salón social para descansar después de un día de cultura e historia.

La tranquilidad de levantarte con unas vistas al valle de Isábena / Turismo de Aragón

Sin duda, abrir la puerta de la hospedería es volver al pasado. No tanto por su interior sino por el entorno en el que se ubica. Las increíbles vistas a la Catedral o al valle de Isábena hace que la hospedería sea un lugar remanso de paz en medio de historia y naturaleza.

Es un pequeño rincón de historia en plena plaza de la catedral, donde la hospedería roza con los muros del templo combinando bienestar y calidad junto a gastronomía y ocio

El rincón mas interesante de esta hospedería es su restaurante, el antiguo Refectorio de la Catedral que viene ejerciendo estas funciones desde 1985 tras una elaborada restauración.

RODA DE ISÁBENA: UNA ESCAPADA OBLIGATORIA

Lo más destacado del pequeño municipio es la catedral. Su construcción se inició en el año 956, por orden de Ramón II, conde de Ribagorza y finalizó en el siglo XVII con la culminación de su torre y del pórtico. Su iglesia cuenta con una preciosa portada con capiteles historiados y puerta de tradición mudéjar.

El increíble municipio medieval de Roda de Isábena: un lugar para perderse / HOY ARAGÓN

En su interior se conserva la cripta con los restos de San Román, en un sepulcro esculpido del siglo XII y primorosas pinturas murales románicas del siglo XII, donde sobresale el Pantocrátor. En tiempos, existió un importante museo con impresionantes y únicas piezas medievales.


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Destacaba la silla de San Ramón, un bien artístico expoliado por el vándalo ‘Eric, el Belga’; en la noche del 7 de diciembre de 1979 al robar una treintena de piezas.

La Silla de San Ramón era el mueble más antiguo de la Península Ibérica. La silla terminó destrozada, ya que ‘Eric, el Belga’ tuvo que dividirla en piezas para sacarla de España sin ser detectado.