El Tubo es la principal zona de tapeo de la capital aragonesa. Ese zona, repleta de zaragozanos cualquier día de la semana y destino predilecto de los turistas, no para de renovarse y de ofrecer nuevas propuestas gastro, que conviven en perfecta armonía con bares que llevan allí varias generaciones.
En el número 10 de la calle Mártires abre sus puertas Antigua Casa Colás. Esta tasca es de esos bares que llevan toda la vida en El Tubo zaragozano. Fundado en 1927 como Casa Domingo (era propiedad del abuelo de Plácido Domingo), luego se transformó en Casa Colás. Y con ese nombre se ha quedado hasta la actualidad, aunque sus gestores sean otros, y la oferta gastro se haya renovado por completo para adaptarse a los nuevos tiempos.
Desde el verano pasado, al frente de Antigua Casa Colás están Juanma, Susana, Enrique y Toño. Un equipo que trabaja día a día para ofrecer una amplia y variada oferta gastronómica basada en tapas y raciones. La cocina de esta taberna del Tubo es tradicional, aunque con un punto de innovación.
La elaboración de las tapas y raciones es completamente casera y natural, nada de alimentos de quinta gama. «Hasta la masa de los hojaldres y canelones se prepara aquí», explica Susana a HOY ARAGÓN. Y eso, lo valora el público que suele llenar este establecimiento zaragozano que también destaca por el trato cálido hacia el cliente. «Los clientes ya son como familia, tratamos de que las personas que nos visitan se sientan como en casa», prosigue Juanma.
QUÉ PEDIR EN ANTIGUA CASA COLÁS
Si vas por primera vez a Antigua Casa Colás te costará decidir qué vas a pedir por la pinta que tienen todas sus propuestas. Para Juanma, las personas que visiten por primera vez esta taberna de la calle Mártires, deberían probar sí o sí, el solomillo al caramelo, y el carpaccio de anchoas.
Pero al margen de estas dos sugerencias, en Antigua Casa Colás hay mucho más que probar. Para empezar, en la barra, destacan 21 tapas. De ellas, media docena son fijas durante todo el año, con clásicos como el canelón de pato, el hojaldre de queso de rulo, el hojaldre de foie, la salmuera o los torreznos.
Junto a estos clásicos, en la barra de Casa Colás hay una amplia variedad de tapas que van variando según la época del año y los productos de temporada. Ahora que viene el verano, las tapas de verduras y las tapas frías ganan protagonismo en la barra.
Junto a las tapas, en esta taberna del Tubo zaragozano hay también raciones, con sugerencias como la carpaccio de tomate con atún y anchoas, el pulpo, el Bacalao Casa Colás, los chipirones a la plancha o el entrecot de Asturias IGP. Los calamares brillan sobremanera entre los clientes de la taberna. Si te apetecen bocadillos, también ofrecen delicias como el bocadillo de Ternasco de Aragón.
Al margen de la comida, también es importante el ambiente. Y por eso, además del trato cercano que ofrece el equipo de la taberna a sus clientes, los fines de semana hay una propuesta que triunfa: los vermús toreros; con tapas y música para amenizar el momento. Por las noches, y para los más animados, también es posible tomarse en Antigua Casa Colás la primera copa.