El Pirineo es tierra de leyendas. El propio origen de la cordillera hunde sus raíces en la mitología, con la historia de Pirene y Hércules. Y entre tantas leyendas, no podía faltar tampoco la historia de un personaje llamado Bosneraru, señor de los bosques y protector de los ganados que también es conocido como el Yeti de los Pirineos.

Hace mucho, incluso antes de que el ser humano habitara las tierras del Pirineo, existía este ser que inventó la agricultura y la ganadería, y poseía todos los secretos sobre estas actividades. Bosneraru vivía entre los bosques y montañas del Pirineo. Tenía una altura desmedida, una fuerza colosal como nunca se ha visto y el cuerpo repleto de pelo.

BOSNERAU, EL PROTECTOR DE LOS GANADOS

Bosnerau

El Señor de los Bosques protegía a los rebaños de lobos y tormentas / arenysam

Y aunque por su aspecto pudiera parecer un ser peligroso y agresivo, lo cierto es que Bosneraru era amable y bondadoso. Aunque vivía en cuevas en las zonas más altas, se dedicaba a proteger los rebaños que pastaban plácidamente en los pastos pirenaicos, y cuando llegaban lobos, o las peligrosas tormentas que tan a menudo suelen azotar los valles y cumbres pirenaicas, silbaba para alertar a los pastores para que pudieran poner a salvo a sus ovejas.

Cuenta la leyenda que para agradecer esa protección, los pastores le dejaban comida en la entrada del bosque; una comida que Bosneraru recogía cuando los humanos dormían. Y las ovejas, en cuanto notaban su presencia, le solían saludar moviendo la cabeza para hacer sonar sus cencerros.

Las viejas crónicas también nos dicen que fruto de esa generosidad y de su buen corazón, este gigante barbudo y con el cuerpo lleno de pelo también enseñó a los primeros habitantes del Pirineo a cultivar los campos, cuidar del ganado e incluso cómo trabajar la madera para crear útiles que les hicieran el trabajo y la vida más fácil.

Cuentan las leyendas que este ser generoso y de aspecto espeluznante vivía en los valles de Ansó, Tena y Broto, recibiendo distintos nombres. Por ejemplo, en el valle de Broto era conocido como Bosnerau, pero en los valles occidentales se le conoce como Basajarau.

El personaje también tiene su réplica en algunos valles del Pirineo navarro y del País Vasco, donde se le conoce como Basajaun. En el Himalaya tendría su réplica con el hombre de las nieves, mientras que en lugares como Estados Unidos encontramos al Bigfoot o el Amasty en el Caucaso.