El Índice de Satisfacción del Cliente (ISC) del servicio de bus urbano de Zaragoza, operado por AVANZA, obtiene este año un 7,80, el dato más alto desde que se iniciara la concesión en 2013. Supone un incremento de 1 punto respecto a la nota obtenida en la primera encuesta (6,80) y mejora sustancialmente la obtenida en 2019 (7,56), la última realizada. Esta puntuación de los usuarios confirma la tendencia anual de mejora del servicio y reconoce el esfuerzo realizado en un año marcado por la pandemia. Estos datos se han obtenido de la medición anual de la calidad percibida, a través de la realización de encuestas a casi 11.800 usuarios de toda la red de autobús, entre los meses de octubre y noviembre pasados.

Los encuestados tuvieron que valorar la importancia que otorgan a diferentes aspectos del servicio como la accesibilidad, la información, el confort, la seguridad o el impacto ambiental, así como el grado de satisfacción con cada uno de ellos. Precisamente los tres aspectos mejor valorados son también los más importantes para los usuarios: el impacto medioambiental (7,83), la seguridad y la accesibilidad (7,81). Por líneas, la mejor valorada es la 39 (Pinares de Venecia – Vadorrey), que obtiene una nota superior a 9. Además, otras ocho líneas (23, 36, 38, 43, 55, 57, 58, y C1) están valoradas con más de un 8, y el resto de líneas de la red recibe puntuaciones por encima de 7, mejorando la valoración de años anteriores.

El objetivo de la medición anual de la calidad percibida es conocer la valoración del servicio recibido por parte de los usuarios de los autobuses urbanos de Zaragoza, así como identificar los elementos de valor para el usuario y su importancia relativa. De esta manera, en función de la calidad percibida y las expectativas detectadas, se puede definir un plan de mejora de la calidad del servicio.