El Ayuntamiento de Calatayud y CaixaBank han establecido un protocolo que permitirá gestionar las ayudas de urgencia para familias vulnerables económicamente o que se encuentre en situación de exclusión social, que se hayan visto agravadas por el coronavirus en la ciudad de Calatayud.
El Consistorio dispone de una partida presupuestaria para destinar a la cobertura de las necesidades básicas de estas familias vulnerables en Calatayud.
Se trata de las denominadas ayudas de urgencia que se gestionan a través de un reglamento específico que determina quienes pueden ser beneficiarios, cuantías máximas, conceptos, etc.
La mayoría de las ayudas son concedidas para alimentación, especialmente cuando hay menores dentro de la unidad familiar.
«En todo momento se pretende dignificar la prestación económica y evitar la estigmatización de quien debe recurrir a este tipo de recursos, por lo que se van buscando nuevos modelos de gestión, siendo un buen instrumento las tarjetas precarga», indica la concejal delegada de Acción Social y Ciudadanía, Belén Jiménez.
Para el alcalde, José Manuel Aranda: «En la situación actual que estamos atravesando a consecuencia de la crisis sanitaria provocada por la COVID-19, el Ayuntamiento ha buscado fórmulas que puedan beneficiar al comercio local para colaborar en su reactivación. La opción ofrecida por CaixaBank es una excelente opción».
70.000€ PARA LAS FAMILIAS VULNERABLES
Se trata de tarjetas de débito que el Ayuntamiento recargará tras la aprobación de la prestación para que el beneficiario -familias vulnerables de Calatayud- pueda utilizarla en cualquier tienda de alimentación o farmacia que disponga del sistema de pago con tarjeta.
El presupuesto inicial para el pago de estas ayudas que pueden ir destinadas además de a alimentación y farmacia al pago puntual de alquileres u otros elementos esenciales ha sido de 55.400€, si bien ya ha sido aumentado en 10.000€ más al haberse incrementado exponencialmente las solicitudes por la crisis sanitaria.
El perfil mayoritario del solicitante es de mujer sola con cargas familiares, seguido de unidades familiares compuestas por pareja e hijos. En menor medida se encuentran personas que viven solas.
Desde que comenzó el estado de alarma se han tramitado 270 solicitudes por un total de 36.100€ todos ellos destinados a alimentación.