Las localidades turolenses de Alcañiz y Samper de Calanda y las zaragozanas de Caspe y Escatrón recuperarán el domingo 16 de abril la costumbre, ya perdida hace más de un centenar de años, de juntarse en el cuatrifinio en el que confluyen los términos municipales de todas ellas.

En 1918 es el último año datado en el que se produjo este encuentro se produjo entre los responsables de los diferentes municipios en los que se podían resolver las cuestiones comunes que afectaban a unos y otros en los quehaceres diarios. Bajo la denominación de ‘Punto de confluencia’ se celebrará una jornada de buena vecindad que en esta primera ocasión en la que se recupera la tradición acogerá Samper de Calanda.

El mojón que señala el cuatrifinio en el que confluyen estos municipios turolenses y zaragozanos cuenta con cuatro oquedades en las que los respectivos responsables podían depositar sus propios recipientes cuando se juntaban.

La jornada comenzará con una recepción oficial en el Ayuntamiento de Samper de Calanda, para posteriormente dirigirse hasta el cuatrifinio donde se realizará una recreación histórica, para finalizar con una visita a algunos de los balsetes recientemente recuperados y restaurados en la localidad samperina por parte de la asociación ‘Amigos de los balsetes’.