Por fin, el Pirineo está repleto de nieve. Los valles pirenaicos han recibido nieve en abundancia en las últimas semanas tras la bajada de temperaturas, y los esquiadores han vuelto a las montañas aragonesas para disfrutar de la mayor superficie esquiable de España, y de toda la oferta de ocio y restauración que podemos encontrar en torno a las estaciones de esquí.

Porque tras un largo día deslizándose por las laderas de Astún, Candanchú, Formigal, Panticosa y Cerler, es imprescindible reponer fuerzas en cualquiera de los restantes que abren en su entorno y que dan vida y dinamizan la economía de estos valles.

DÓNDE COMER TRAS UNA JORNADA DE ESQUÍ

Dónde comer tras esquiar

El Hotel Santa Cristina es una opción para comer si esquías en el Valle del Aragón / Santa Cristina

Si estás esquiando en las estaciones de esquí de Astún y Candanchú, la oferta gastro del Valle del Aragón es amplia y variada. En Canfranc Estación, a menos de 10 minutos de las pistas, nos encontramos con El Boj, el restaurante del Hotel Santa Cristina.

Allí podrás encontrar una cocina de temporada con producto de temporada con especial atención al producto del Pirineo y aragonés, y con propuestas como un menú del día por 23,50, o el Relax&Food: por 33 euros podrás disfrutar del menú del día, y acceso durante 45 minutos al Petit Spa para relajarte tras un largo día de esquí.

También en Canfranc encontramos el restaurante del Hotel Villa de Anayet (Pl. de Aragón, 8), con propuestas como el pollo de corral a la brasa, secreto de cerdo ibérico con salsa de mostaza y miel y la longaniza de Aragón, que combinan en una sabrosísima sartén de huevos rotos, o Laduanilla (Av. de los Arañones, 6), un acogedor restaurante ideal para tomarse unas raciones.  En breve, se unirá también el restaurante de lujo del nuevo hotel Barceló de la Estación de Canfranc, ubicado en antiguos vagones de tren rehabilitados.

Dónde comer tras esquiar en el Pirineo

Chuletón de vaca del Pirineo / Restaurante Corbacho

Un poco más abajo, en Jaca, no hay que perderse las ricas tapas de La Tasca de Ana ( C. Ramiro I, 3), el restaurante Corbacho (calle Ramiro I, 2), con su cocina basada en recetas tradicionales del Alto Aragón y en la elaboración en horno y brasa de leña. A cinco minutos de Jaca, en Ulle, encontramos también uno de los Soletes Repsol de esta zona, Borda Chaca (C. Única, s/n). Allí, no hay que perderse las migas y el cordero a la brasa. 

Si cambiamos de valle y vas a estar esquiando en Formigal, podremos encontrar Roto en el Snö Hotel Formigal. La conocida propuesta de ocio y gastronomía de Ibiza abrió al comienzo de la temporada su delegación en Formigal con tres ambientes diferentes para comer, cenar o disfrutar del tardeo y del apres ski. También en esta estación de esquí está Vidocq (Edificio Jacetania, Avenida Huesca), un restaurante que es Sol Repsol, que está recomendado en la Guía Michelin y en el que comer es todo un espectáculo gracias al buen hacer del chef Diego Herrero.

Dónde comer tras esquiar en el Pirineo

Huevo de gallinas, trufa negra , patata de cultivo de altura y jugo de ternera / Vidocq

En Sallent de Gállego podemos comer en  Casa Martón (Pl. Valle de Tena, 5),un restaurante de cocina tensina de toda la vida que fue reformado durante la pandemia y que cuenta con una atractiva carta elaborada con productos de km 0, verduras naturales, paté casero, y unas exquisitas carnes del propio valle hechas en leña. Tampoco hay que perderse Casa Fauré (C. de Francia, 37), un clásico en Sallent que tiene un comedor montañés donde se puede degustar una carta basada en la cocina tradicional.

En Panticosa una estupenda opción es Mesón Sampietro (Bo. Alto, 1), donde podrás disfrutar de un menú típico del Pirineo Aragonés, con hortalizas y verduras recolectadas en su propia huerta, o una amplia variedad de carnes a la brasa. Más abajo, en Biescas encontramos El Montañés (C. Escudial, 1), un restaurante de cocina actual con productos locales e internacionales, o el Tiki Bar (C. Mayor, 19,) un lugar que cuenta con un Solete de la Guía Repsol con tapas y raciones como las manitas deshuesadas con patata trufada o el pisto al aroma de trufa.

Para acabar, y si estás disfrutando del esquí en Cerler o en Llanos del Hospital, la oferta gastro del Valle de Benasque no se queda atrás. En Benasque podemos encontrar lugares con Soletes de la Guía Repsol como El Fogaril del Hotel Ciria ( Av. los Tilos, s/n), donde destacan las carnes de caza o las carnes rojas criadas en el valle de Benasque, o La Llardana (Cam. San Antón, s/n), donde podrás disfrutar de carnes a la brasa, asados, pucheros, cocina de temporada.

En el propio Cerler, puedes encontrar La Borda del Mastín (c. Obispo, s/n) donde la especialidad es la carne de buey, o la brasería El Rincón Cerler (Pl. la Iglesia), donde la carne se asa a la vista de los comensales. Para acabar, no podíamos dejar de recomendar visitar en Anciles el restaurante Ansils (Calle Gral. Ferraz, n°6), el sitio ideal para degustar la gastronomía de Huesca con una carta sorprendente elaborada con productos de temporada y de cercanía. Como consejos, no dejéis de probar la que probablemente es una de las mejores tartas de queso del país.