El presidente de la Generalitat cesado, actualmente fugado en Bruselas, y candidato de ‘JuntsxCat’ a las elecciones del 21 de diciembre, Carles Puigdemont, ha tachado de «pillaje» el traslado de los bienes de Sijena.
Las obras del monasterio oscense se encontraban en el Museo de Lérida. El traslado se debió a un requerimiento judicial para hacer efectiva una sentencia del Juzgado de Huesca. La devolución se realizó tras la entrada en el centro museístico de la Guardia Civil, por la falta de voluntad de los funcionarios del Museo de Lérida en la devolución, el pasado lunes 11 de diciembre.
En una entrevista en el periódico ‘Segre’, Puigdemont ha asegurado que «trataron las obras de arte como un botín de guerra».
Y ha relacionado el traslado de los bienes con la aplicación en Cataluña del artículo 155 de la Constitución.
«Las estanterías vacías que dejaron las piezas son una metáfora de la Cataluña que quiere el bloque del 155, porque no hay que olvidar que si la Guardia Civil entró en el museo fue porque tenía la complicidad del partido del alcalde de Lleida, Àngel Ros (PSC), que ahora parece que se esconda», ha criticado.