El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, tiene claro que la ubicación del nuevo campo de fútbol, ya sea en un emplazamiento distinto o mantener el actual en La Romareda, se decida por criterios técnicos. No habrá una mano política que decida dónde debe ubicarse sino que mediante el planteamiento urbanístico y técnico se tomará la mejor decisión. Al margen de esa apreciación, hay ubicaciones que tienen más peso que otras. En principio, la idea de instalar el campo municipal en San José en caso de cambiar de ubicación es la que tiene más enteros. También se contempla Valdespartera o Arcosur. Sin embargo, la idea que defiende el gobierno de PP y Ciudadanos que lidera Jorge Azcón es la de mantener la misma ubicación y a día de hoy es la única que se contempla.

Y todavía hay una incógnita más allá de la ubicación: se tiene que saber cuánto se quiere invertir y qué administraciones son las implicadas para que se logre la construcción del nuevo campod e fútbol. Desde el Ayuntamiento de Zaragoza explican a este diario que para ello deberá haber un plan económico y una ubicación clara, así como la determinación de conformar un consorcio entre todas las instituciones implicadas, tanto públicas como privadas. 

«A mi me corresponde intentar llegar a un consenso y no poner palos en la rueda. Mi obligación es llegar a un acuerdo desde un folio en blanco, no lanzar ideas a los medios de comunicación, y sé que para llegar a un consenso lo mejor es trabajar en conversaciones entre los grupos y las administraciones y los medios de comunicación informarán diligentemente de todo lo que se acuerde», dijo el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, hace pocos días.

El alcalde subrayó que trabajará para que ese consenso «exista» y se llegue a un acuerdo. Y agregó: «Sé cuál es la actitud de consenso que hay que tener y no critico a nadie y no lanzo acusaciones que tengan que ver con esto«, en referencia al emplazamiento.

Al respecto, recordó que prácticamente todos los grupos han defendido una cosa y la contraria, excepto Chunta Aragonesista, que siempre ha defendido mantener el estadio de fútbol en el emplazamiento actual. «Por eso se tiene que enfocar desde criterios técnicos y no politizar el lugar donde tiene que ir. Hay que valorar los pros y contras», dijo.

LA INQUIETUD POR LA UBICACIÓN

Por su parte, el consejero municipal de Urbanismo, Víctor Serrano, insiste públicamente que no le gusta la postura prefijada por algún grupo municipal, en especial por Podemos que ya exigía la ubicación en Arcosur. Fuentes del Ayuntamiento de Zaragoza concretan que el inicio de la negociación con los grupos políticos y el resto de administraciones debe hacerse desde un folio en blanco. «Sorprende que algunos sin ver un solo folio digan donde debe ir el campo de fútbol porque antes hay que tomar otras decisiones como la financiación, quien participará, en qué fórmula jurídica y el papel de cada uno», dijo Serrano recientemente.

El responsable de Urbanismo detalló que se trabaja de forma interna con los portavoces de los grupos municipales y de forma externa para generar «sinergias y alianzas» con otras administraciones y el club -del Real Zaragoza— y en una esfera en la que «el rigor técnico, la seriedad y el consenso es incompatible con hacer determinadas cosas». «Los grupos no pueden disparar por su cuenta, antes de tener una primera reunión, para decir donde tiene que ir el campo», explicó.