El Ayuntamiento de Jaca (Huesca) ha tomado nuevas medidas relativas a la movilidad en este estado de alarma provocado por el coronavirus y ha cerrado los espacios públicos destinados a la suelta de perros con el fin de evitar «la picaresca» de algunos vecinos para burlar las restricciones.


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Aunque la mayoría de la ciudadanía cumple con las limitaciones decretadas por esta situación excepcional, recuerda el consistorio, una parte minoritaria «hace un uso incorrecto» de las mismas y utiliza los medios permitidos y la «picaresca» para burlar las medidas aprobadas.

De este modo, se cierran los espacios destinados a los perros, se prohíbe el acceso a ellos y tampoco se permitirán paseos de animales domésticos, principalmente canes, a más de 300 metros del domicilio, el uso de los mismos «como excusa» para eludir las limitaciones de movimiento, o miembros de la misma familia paseando varias veces al perro.

Los agentes de la Policía Local podrán comprobar los datos con el lector de microchip y verificar el domicilio donde residen el propietario y el animal.


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El Ayuntamiento advierte asimismo de que no se entenderá justificada la presencia en la vía pública con el fin de realizar compras «pequeñas y reiteradas«, pudiéndose solicitar el recibo o factura de compra para comprobar el horario de adquisición de la misma y la permanencia de la persona en la calle.

El objetivo de estas decisiones es evitar lo máximo posible la propagación del coronavirus y ayudar a salvar vidas, recuerdan desde el consistorio, toda vez que apelan a la solidaridad de la ciudadanía y a la responsabilidad social.

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