El presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, ha asegurado que subir o bajar el impuesto de Patrimonio es «irrelevante» para el desarrollo de la economía, es decir, que no hay correspondencia entre unos niveles altos o bajos de este impuesto y el nivel de atracción de riqueza de una comunidad.


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Así lo ha asegurado en el pleno de las Cortes en respuesta a una pregunta del líder de Ciudadanos, Daniel Pérez Calvo, quien le ha preguntado por las medidas que piensa tomar el Gobierno para cumplir el punto del acuerdo de legislatura del cuatripartito que establece que la presión fiscal de Aragón estará por debajo de la media del resto de comunidades.

En un contexto en el que hay comunidades que han comenzado a bajar impuestos, el ejecutivo aragonés tendrá que ir «revisando constantemente» su fiscalidad para cumplir este acuerdo, según Pérez Calvo, quien ha reclamado por eso una revisión para acometer una reforma fiscal que garantice que Aragón no sube de la media. Siendo, por otro lado, que la comunidad es una de las tres que más gravan Patrimonio, Sucesiones y Donaciones.

Lambán le ha replicado que la fiscalidad en Aragón sigue estando por debajo de la media nacional y que la parte autonómica de los impuestos es «mínima». Y ha rechazado la «correspondencia» que algunos hacen entre el desarrollo económico e impuestos como el de Patrimonio, porque «el único elemento auténticamente determinante» es el régimen foral de Navarra y País Vasco. En cualquier caso, Lambán mira «con respeto» las reformas anunciadas por otras comunidades, cada una con sus circunstancias.


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Ha recordado también que Aragón está inmersa en un proceso de revisión fiscal de la parte «mínima» en la que puede actuar pero siempre con el objetivo de que los servicios públicos queden «intactos». En la misma sesión, el portavoz de IU, Álvaro Sanz, le ha preguntado por las medidas a adoptar ante la pérdida del poder adquisitivo de las rentas del trabajo, en un momento en el que la inflación está en torno al 9 % y los salarios solo han crecido un 1,3 %. Los beneficios empresariales se han incrementado un 84 %.

Sanz ha pedido a Lambán que frente a algunas declaraciones como las del presidente de la CEOE, Antonio Garamendi -en el sentido de que no se puede hablar de ricos y pobres y de que jamás aceptará un acuerdo que vincule la subida de los salarios al IPC-, exija la negociación colectiva en un fin de año que, por la finalización de decenas de convenios en Aragón, se prevé «conflictivo».