El Gobierno de Zaragoza presentó la semana pasada los números concretos de sus prioridades políticas: el presupuesto del Ayuntamiento para el año 2018. Destaca el aumento global de las cuentas, hasta un 4% más respecto al año anterior o la previsión de reducir la deuda en 33 millones de euros.


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Entre otras, la partida para la limpieza pública y tratamiento de residuos asciende un 5,84% hasta los 71,2 millones, un incremento de 4,2% en Servicios Sociales con el destacado refuerzo de las ayudas de urgencia dentro del plan de choque contra la crisis con hasta un 9,4 millones, se implementan los 6 millones de euros necesarios para la reforma del Mercado Central.

Por ejemplo, destaca en el área de Cultura el coste de las subvenciones a proyectos culturales hasta los 500.000 euros o la recuperación del patrimonio sin uso en dos millones de euros (la nacionalización de la capilla del parque Delicias, la imprenta Blasco o los baños judíos).

Desglose de las concejalías en millones de euros / María Pasaro

LAS CUENTAS, EN EL AIRE

La presentación de los presupuestos del año siguiente deben dar pie ahora a las negociaciones entre los grupos municipales para su aprobación. La negociación por parte de ZEC pretende mirar sólo al lado izquierda de la política municipal -PSOE y Chunta- a pesar de las diferencias notables de los últimos días.

En el día de hoy, el concejal del PSOE Javier Trívez ha criticado la forma que ha elegido ZEC para aprobar las cuentas municipales de 2018, que cree que denota que «no quiere llegar a acuerdos«, pero ha asegurado que trabajarán para que ese «suicidio colectivo» no llegue a efecto y Zaragoza tenga presupuesto.

La portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Zaragoza, Sara Fernández, ha asegurado hoy que el proyecto de presupuestos para 2018 revela que ZEC no tiene modelo de ciudad y le falta ambición e imaginación.


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Por su parte, el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Zaragoza, Jorge Azcón, ha considerado hoy que el proyecto de presupuestos elaborado por el Gobierno de ZEC es el de «la venganza» contra PSOE y CHA, ya que se ha empleado «a fondo» en quitar las partidas introducidas hace un año por estos dos grupos.