Los militantes del PAR que apoyaron la candidatura de Elena Allué a la presidencia del partido en el XV Congreso que esta formación celebró el pasado fin de semana han apelado a la unidad, al diálogo y a «rebajar la tensión, la crispación» tras el duro enfrentamiento en el Congreso donde hubo acusaciones de pucherazo e ilegalidades.

Así lo ha explicado el presidente de las juventudes del PAR, el Rolde Choben, Alejandro Poy, que formaba parte de la lista de Allué como vicepresidente del PAR, candidatura que no obtuvo los apoyos suficientes, que sí recabó la de Arturo Aliaga con el 52% de los votos, que ha sido reelegido en el cargo. Las supuestas ilegalidades denunciadas por los críticos están a día de hoy en un juzgado a la espera de resolución judicial tras la demanda presentada por éstos.

En declaraciones a los medios de comunicación, antes de participar en la reunión convocada por estos militantes para compartir puntos de vista y valoraciones sobre el XV Congreso y futuras líneas de trabajo, Poy considera que en el sector crítico «hay un proyecto político renovador, que representamos nosotros y en la otra parte hay otro proyecto político» y «no cabe ni el odio, ni la venganza personal, ni los vetos» y por eso «hay que hacer un llamamiento a rebajar la tensión».

Poy ha abundado al señalar que en los partidos políticos hay distintos puntos de vista, «nada es monolítico, puede haber distintas corrientes y no pasa nada», al contrario, mantener un debate interino orgánico «es enriquecedor, demuestra que es un partido vivo» y por su parte «no va a quedar» para favorecer el diálogo entre ambas partes.

COMPROMETIDOS CON EL CAMBIO

El presidente del Rolde Choben ha contado que están «comprometidos con el cambio y con otra forma de hacer política», con un PAR «renovado» y «tenemos bastante ilusión» porque «hemos recibido estos días el aliento» de cientos de militantes, así como «de aragonesistas de siempre y de ahora» y «de otros que abandonaron el partido en su día y se muestran ilusionados con este nuevo proyecto que estamos iniciando».

Por todo ello, la intención de los críticos del PAR es recorrer el territorio para hablar con los militantes y con los aragoneses para «escucharlos de forma activa y así empatizar con los problemas que sufre la gente en el territorio e intentar resolverlos porque la política se trata de eso».

Poy ha comentado que, tras el Congreso y según los estatutos, hay 90 días para renovar los comités locales, comarcales e intercomarcales del partido, una de las cuestiones que se ha analizado en la reunión. Es ahí precisamente la pugna que tienen abierta contra Arturo Aliaga y el sector oficialista. Tras la victoria del actual vicepresidente aragonés, los críticos buscan darle la vuelta a la situación interna y hacerse con la mayoría de las bases agrupadas en los comités locales, comarcales e intercomarcales.

No obstante, ha aclarado que objetivo en el territorio es exponer una nueva forma de hacer política PAR, su proyecto «y atender a muchas personas que en los últimos tiempos se han quedado más bien fuera» y, sobre todo, sumar».