El Área de Urbanismo y Equipamientos del Ayuntamiento de Zaragoza ha emitido una nueva instrucción con una serie de medidas de ahorro de energía con el fin de reducir los consumos en los equipamientos municipales, entre ellas, limitar a 19 grados la temperatura en los espacios cerrados calefactados, donde la refrigeración deberá mantenerse apagada.
Tal y como recoge el documento, ante la subida de los precios de la energía y del “perjuicio económico que está representando para las arcas municipales”, el Área de Urbanismo ha visto necesario, de cara a la época invernal, dictar nuevas instrucciones para que “en las diversas dependencias e instalaciones municipales se proceda a seguir con una serie de pautas encaminadas al ahorro directo de consumo”.
De esta forma, según ha informado el Ayuntamiento de Zaragoza, exclusivamente se utilizará la climatización cuando sea totalmente necesario y no se pueda alcanzar la temperatura óptima por medios naturales, y los horarios de calefacción se ajustarán al mínimo necesario para garantizar la temperatura de confort establecida.
De hecho, el Servicio de Conservación de Arquitectura establecerá los criterios de encendido y apagado de los sistemas de calefacción en base a las predicciones realizas por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
Las calefacciones en los equipamientos municipales no se encenderán hasta entrado el mes de noviembre, salvo circunstancias climáticas excepcionales, y se apagarán a finales del mes de marzo, y se mantendrán cerradas las puertas y ventanas fuera del horario laboral.
También se mantendrán cerradas las puertas interiores de las distintas dependencias, en especial las cortafuegos, de forma que la ventilación periódica se hará abriendo las ventanas, y se tendrá que evitar cubrir los radiadores con cajas u otros objetos y se dejarán libres las rejillas de impulsión y extracción de aire.
En cuanto al alumbrado, el Ayuntamiento ha indicado que en el interior de las dependencias municipales se deberá mantener apagado fuera del horario laboral y que durante el horario de actividad, permanecerán sin luz las estancias en las que no haya presencia de personas ni actividad, y que se aprovechará la luz natural.
La instrucción también recoge que se desconectarán de la corriente aquellos equipos eléctricos que no se estén utilizando, que se evitará el uso de papel impreso cuando no sea imprescindible y que se imprimirá por las dos caras y en blanco y negro.
Además, se mantiene la prohibición de conectar estufas en los distintos puestos de trabajo, salvo petición expresa de la jefatura del Servicio; encender los alumbrados exteriores de los edificios municipales que dispongan de iluminación arquitectónica a las 22:00 horas o hasta que finalice su actividad y el uso de agua caliente en el centro de trabajo cuando no sea imprescindible, desconectando termos eléctricos.