Hasta 18 actuaciones previstas en Aragón figuran desde hace, al menos, 10 años en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) y todavía no se han ejecutado. En una nota de prensa lo ha denunciado el líder de Chunta Aragonesista, Joaquín Palacín, señalando que «es la prueba evidente de los constantes aplazamientos de las obras pendientes en Aragón. No se ejecuta todo lo previsto y además se incumplen sistemáticamente las inversiones dispuestas en los programas plurianuales. El resultado es que en la mayoría de estas infraestructuras las máquinas ni siquiera han empezado a trabajar».

«De este modo, con estos continuos aplazamientos, en esta legislatura, ni una sola de las autovías pendientes en Aragón estará concluida íntegramente», ha pronosticado. Los proyectos que llevan una década o más contemplados en los PGE para Aragón son los tramos Sabiñánigo Este-Oeste y Lanave-Jabarrella de la A-23; Enlace de Sigüés-Enlace de Tiermas y Jaca Este-Norte-Oeste y Puente la Reina-Fago de la A-21; Siétamo-Huesca de la A-22; Alfarrás-Tamarite-Purroy-Benabarre de la A-14; El Burgo-Fuentes de Ebro de la A68 y Cuenca-Teruel (A-40).

También, la variante Sur de Huesca y el acceso al aeropuerto de Monflorite; la variante Borja-Maleján; la duplicación de la carretera de Alcolea del Pinar a Monreal del Campo; el tramo Balupor-Fiscal y Congosto del Ventamillo-Campo de la N-260; la variante de Calanda, en la N-420 y la de Alcorisa, en la N-211.