En el camino de ser una ciudad amiga de los perros Zaragoza va dando pasos que la acercan cada día más a esa convivencia en armonía entre mascotas y personas. Uno de los últimos avances es la zona de esparcimiento de la plaza de los Sitios, cuyas obras ya están en marcha y que se abrirá en septiembre. Será el primero de la decena de espacios planteados de este tipo en varios parques y zonas verdes de la ciudad. Son recintos vallados donde los perros podrán ir sueltos sin ocasionar molestias a los usuarios de estos parques y plazas. Además, dispondrán de fuentes de agua adaptadas para que las mascotas puedan beber.


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Además de esta de la plaza de los Sitios, el plan seguirá en octubre con la ejecución de estas zonas de esparcimiento en el Parque Grande, el de Miraflores y el de los Poetas, en el barrio del Actur.  En una fase posterior, se contempla habilitar estos espacios en el parque Tío Jorge y el de Torre Ramona, y en los barrios de La Almozara y Santa Isabel.

La consejera de Servicios Públicos del Ayuntamiento de Zaragoza, Natalia Chueca, y el consejero de Participación y Relación con los Ciudadanos, Javier Rodrigo, han visitado esta semana las obras de ejecución de la zona de esparcimiento de la plaza de los Sitios. A esta se sumarán tan pronto como sea posible otras, como las del Parque Grande José Antonio Labordeta. En este gran espacio verde de la ciudad se plantean al menos dos zonas acotadas de suelta de perros. La primera se ubicará junto al lago del Jardín Japonés, al final de la avenida de los Bearneses. Habrá otra en la zona de El Cabezo. Por su parte, para el Parque Miraflores se contemplan tres zonas.

La superficie de cada recinto dependerá del espacio disponible y algunas zonas tendrán incluso elementos de juego para los perros. En todas se va a instalar cartelería específica para informar sobre buenas prácticas y habrá bancos cercanos para que los propietarios se puedan sentar. De esta manera, los canes podrán correr libremente y jugar entre ellos sin perturbar a las personas que estén haciendo uso de estos parques o zonas verdes al mismo tiempo. Hasta ahora, los casi 70.000 perros censados en Zaragoza solo podían ir sin atar en los parques y determinados espacios a ciertas horas (de 20.00 a 9.00 en invierno y de 21.00 a 9.00 en verano). Con los nuevos recintos no habrá horarios, dando mayor libertad tanto al animal como al propietario.

Medidas como esta vienen motivadas, entre otros factores, por el incremento en el número de perros que hay en Zaragoza. Según las cifras que maneja el Ayuntamiento, desde 2019 y coincidiendo con la pandemia, la presencia de animales de compañía en los hogares zaragozanos ha ido creciendo un 10% cada año. Cada vez más personas incorporan a miembros caninos a su familia por lo que van surgiendo nuevas necesidades que desde el Consistorio se están tratando de cubrir.

En este sentido, desde hace unos meses, los perros son bien recibidos en el Museo del Fuego y otros edificios municipales están estudiando poder permitir también su acceso. Esto facilitaría mucho a sus dueños el día a día, pudiendo hacer gestiones con sus fieles amigos perrunos sin tener que dejarlos atados en la puerta sin saber cuánto tiempo tardarán en salir. Para favorecer la convivencia de todos, la fórmula que se plantea es la de establecer un día concreto de la semana en el que se pueda acceder con perros.


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Poder entrar a los sitios es un avance pero para ello también hay que facilitar poder llegar hasta ellos. En Zaragoza moverse en transporte público con mascota es posible, tanto en el autobús como en el tranvía los perros hace tiempo que son bienvenidos. En el primer caso, pueden viajar aquellos que pesan menos de diez kilos, mientras que en el último convoy del tranvía pueden ir todos siempre que vayan atados. Donde todavía se tiene una asignatura pendiente es en el acceso a bares y restaurantes. Junto con Ceuta, Aragón es la única comunidad autónoma donde está prohibido que los perros entren en estos establecimientos. Por la normativa existente, ni si quiera se permite a los dueño de los negocios que sean ellos quienes decidan si dejan entrar con animales o no. Un hecho que deja a Zaragoza y a toda la Comunidad muy por detrás del resto de España y que el Grupo Popular en el Ayuntamiento quiere cambiar.

Para llevar a cabo todas estas mejoras que tratan de dar respuesta a una sociedad cambiante donde los perros están cada vez más presentes como un miembro más de la familia el Ayuntamiento se apoya en el Colegio de Veterinarios y en personas dedicadas a la inclusión de los perros en todos los ámbitos.