Las 344 residencias de ancianos de Aragón -donde 8.700 profesionales asisten a 22.000 residentes- suman 687 positivos por coronavirus desde el inicio de la crisis, con 212 que han requerido de hospitalización y aglutinan 168 de los 251 fallecidos por coronavirus en la comunidad.


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A la intervención sanitaria en estos centros se ha sumado ahora la decisión del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS) de intervenir desde el punto de vista asistencial tres centros más: el Asilo de San José de Teruel, la residencia de Los Olivos de Huesca y el Centro de Personas Mayores de Épila (Zaragoza), como ha informado en rueda de prensa la consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales.

En este sentido, ha aclarado que la intervención se produce con la única intención de proteger a las personas mayores y ayudar a la dirección de estos centros.

Ha subrayado también que los mayores internos estaban «a gusto» y «felices» en las residencias aragonesas hasta la llegada del virus, que ha obligado a que algunas de ellas se transformen en centros con una respuesta sanitaria además de asistencial.

Para ello, desde el 6 de marzo, dos días después de que se registrara el primer caso en Aragón, si dieron instrucciones de que se tomaran medidas de aislamiento para evitar contagios y, en su caso, se recurriera a la hospitalización cuando fuera necesario.

Broto ha reconocido, no obstante, problemas a la hora de dotar a estos centros de material de protección por las dificultades de adquirirlo «a nivel mundial«, pero ha insistido en que están poniendo «todo el empeño» en ello, así como en la desinfección de las residencias que lo solicitan o en la puesta en marcha de nuevos recursos «a máxima velocidad».


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Este es el caso de los cuatro centros puestos en marcha por el Gobierno autonómico para atender a pacientes de residencias de mayores con coronavirus, al que se sumará un quinto en Gea de Albarracín (Teruel).

Así, el primer centro en abrir, el de Yéqueda (Huesca), tiene 41 de sus 46 plazas disponibles ocupadas; el del barrio zaragozano de Miralbueno, 45 internos de 47 plazas; el de Alfambra (Teruel), 13 de 62; mientras que el de Casetas (Zaragoza) acaba de entrar en funcionamiento con 128 plazas más.