El Gobierno de Zaragoza ha aprobado este viernes, 31 de marzo, los pliegos que permitirán la enajenación del derecho de superficie a 75 años de la parcela deportiva del campo de fútbol de la Romareda y otros 20.500 metros cuadrados de usos terciarios edificables, con el objetivo de construir un nuevo estadio de cara a que la ciudad pueda ser sede del Mundial de Fútbol de 2030, al que opta España.

Así lo ha dado a conocer el consejero municipal de Urbanismo, Víctor Serrano, en rueda de prensa, que ha subrayado el objetivo de que Zaragoza «llegue en las mejores condiciones de cara a la reunión que el próximo 19 de abril mantendremos con los evaluadores de la candidatura del mundial 2030».

«Hoy es un día muy importante para el Ayuntamiento y la ciudad», ha sostenido Serrano, que ha comentado que culminada toda la tramitación urbanística con la aprobación definitiva de la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), esta semana, en el pleno del miércoles, se han aprobado estos pliegos.

El consejero ha indicado que, aunque no era preceptivo, se cuenta con un informe de la asesoría jurídica «avalando toda la cuestión desde un punto de vista de la transparencia y legalidad del expediente administrativo». Serrano ha comparecido junto con la consejera municipal de Servicios Públicos, Natalia Chueca, quien ha resaltado el «excelente trabajo, sin desaliento» del consejero de Urbanismo, «a pesar de los problemas motivados por los frenos que nos ha ido poniendo el PSOE, en este largo proceso».

Igualmente, ha expresado su satisfacción por el «ritmo de trabajo de este gobierno», que el miércoles aprobó los cambios urbanísticos y a los dos días «la licitación para hacer que Zaragoza sea sede del mundial del 2030, una gran oportunidad para la ciudad».

CARACTERÍSTICAS DEL PLIEGO

El consejero de Urbanismo ha detallado que la licitación para la transmisión de un derecho de superficie a 75 años es «un criterio mejorable a la baja, es decir, los licitadores podrán acudir ofreciendo un plazo menor».

Asimismo, lo que se enajena serán los 47.399,30 metros cuadrados de la superficie de la parcela deportiva del campo de fútbol y los 20.500 de terciario edificables, cuyas valoraciones, según el expediente que incluye el informe de la jefa de servicio de Suelo y Vivienda del Ayuntamiento de Zaragoza se elevan 36,189 millones de euros, si bien habrá que descontar de esa cantidad los 5,3 millones que supondrán la demolición del antiguo edificio de la gerencia de Urbanismo, «que irá a cargo a quienes se adjudique la licitación y los derechos de superficie».

EL 15 DE SEPTIEMBRE: LA FECHA MARCADA

El plazo máximo para presentar los proyectos se ha fijado en el próximo 15 de septiembre, «más que suficiente para que cualquier inversor interesado en la construcción del campo de fútbol se pueda presentar», ha dicho Serrano.

Ese día, se reunirá la mesa de contracción y se adjudicará el proyecto, fecha a partir de la cual habrá cuatro meses para la presentación del proyecto básico y de demoliciones, es decir, hasta el 15 de enero de 2024, y otros seis meses, hasta el 15 de junio de ese año, para presentar un proyecto definitivo, con el objetivo de que puedan comenzar las obras en el verano del año que viene y estén terminadas en 2028 o, en todo caso, en 2029, si se sufre algún retraso.

Por su parte las demoliciones podrán comenzar en enero de 2024, ya que estas no requieren de proyecto básico. Además, Serrano ha comentado que una obligación de los pliegos es que el Real Zaragoza pueda jugar en el campo de la Romareda mientras duren las obras y también que este equipo tendrá el uso preferente del nuevo estadio y se habrá de respetar su calendario deportivo.

FORMA DE PAGO

Respecto a la forma de pago, esos más de 30 millones de euros se deberán satisfacer al Ayuntamiento «a través de un canon, aplazado y de forma creciente», estableciendo una carencia para los primeros cinco años, cuando el campo esté en construcción, en los que no habrá que pagar nada. A partir del sexto año, habrá un coeficiente de corrección de incremento del 0,8 por ciento anual.

Por otra parte, para garantizar y asegurar la operación para el Ayuntamiento, se ha fijado una fianza provisional del 1% del coste total de proyecto al principio de la obra y una fianza definitiva del 5% del total de la construcción del campo de fútbol.

El pliego ha incluido una recomendación del informe de la Intervención, que también ha evaluado los pliegos, «que no es de obligado cumplimiento, pero hemos querido incorporar» y que supone que en el caso de que a quien se adjudique quiera hipotecar el derecho de superficie, el Consistorio «va a tener un aval sobre esa hipoteca, de tal manera, que si hubiese algún problema de cara a terminar el campo, con la ejecución de ese aval por parte del Ayuntamiento se garantizaría poder acabar de construirlo». «Por lo tanto, no existe el riesgo si el fondo de inversión o la entidad que se lo adjudique concurre en un concurso», ha apostillado.

FACULTADES DEL AYUNTAMIENTO SOBRE EL CAMPO

El consejero municipal ha expuesto las facultades que van a estar a disposición del Ayuntamiento de Zaragoza «para no perder ningún tipo de control sobre el campo de fútbol», como es que, durante todo este proceso, «además de seguir las prescripciones técnicas», el proceso va a estar supervisado por un funcionario municipal, «que designaremos».

Asimismo, los pliegos reflejan que el Ayuntamiento de Zaragoza va a conservar la potestad de, al menos, poder celebrar tres eventos a lo largo del año, durante la vigencia de este derecho de superficie, respetando el calendario deportivo del Real Zaragoza.

Además, el estadio deberá estar a disposición de la ciudad «con un año de antelación» a la celebración del Mundial, «y siempre en los lazos que disponga la Federación Española de Fútbol».

Otras prescripciones del pliego son que quien vaya a redactar el proyecto del nuevo campo ha de tener reconocido prestigio, que el estadio tendrá capacidad para 42.500 asistentes, y al menos siempre 40.000 en cualquier evento deportivo, así como otras recomendaciones de la FIFA, como disponer de videopantallas. Las mejoras del canon o de la capacidad del campo, si se mejora al alza, supondrá una mayor puntuación en el proceso de licitación.