La remodelación del edificio de la Facultad de Filosofía y Letras, la que fuera primera facultad del campus, es ya una realidad. Las obras de reforma y ampliación del edificio de Filosofía y Letras comenzaron el último trimestre de 2018 con el objetivo de acometer la rehabilitación integral del edificio histórico, construir otro de nueva planta con tecnología avanzada urbanizar el entorno.

En ese tiempo se ha tenido que hacer frente a imprevistos, entre los que han tenido un especial impacto la pandemia, la guerra de Ucrania y la ruptura de la cadena de suministros. A pesar de esos inconvenientes, la sintonía entre la empresa constructora, la dirección facultativa y los órganos de gestión de la Universidad de Zaragoza han permitido avanzar a buen ritmo y convertir el proyecto del arquitecto Jaime Magén en una realidad.

La inversión realizada en la obra ascenderá a 24 millones de euros, más 4 millones más por la revisión extraordinaria de precios. El edificio acogerá 10 grados universitarios, 11 másteres oficiales y dedicará espacios a dos institutos de investigación (IPH e IUCA), es decir, en la nueva Facultad de Filosofía y Letras estudiarán más de 2.500 alumnos, trabajarán más de 500 profesores, investigadores y colaboradores y 70 empleados de administración y servicios.

CINCO BLOQUES INTERCONECTADOS

El conjunto edificado tiene cinco bloques perfectamente interconectados. El denominado bloque A, el edificio noble de Borobio y Beltrán, se destina, preferentemente, a la docencia y alberga más de 40 espacios de aulas y seminarios de todos los tamaños. Ademas, en este bloque se instalarán el decanato, los espacios de administración y un recinto promotor de la salud y de fomento de la relación interpersonal.

El bloque B es el edificio de nueva construcción y contará con despachos de profesorado, una sala de estudio y una zona de exposiciones. En el espactacular atrio, en el que hoy se ha colocado una cápsula del tiempo en la que se han depositado los periódicos locales del día, los planos de las obras, losetas del antiguo suelo de la facultad, insignias y documentos sobre las personas que trabajan en el centro y una edición en miniatura del Estatuto de Autonomía de Aragón, se pueden desarrollar todo tipo de actividades, incluída la docencia abierta, y será el area principal de relación de los estudiantes.

El bloque C, tradicionalmente llamado de Historia, contiene despachos y laboratorios. El bloque D es el Aula Magna y dos salas de uso múltiple de gran tamaño y, por último, el bloque E, popularmente denominado ‘Pabellón de Geografía’, alberga, al igual que el bloque C, despachos y laboratorios.

MÍNIMO IMPACTO AMBIENTAL

La nueva Facultad de Filosofía y Letras es un edificio de mínimo impacto ambiental, una característica que ha guiado la construcción y está presente en la utilización de los espacios. De hecho, el edificio de nueva planta cuenta con una calificación energética A con unos indicadores de demanda de energía y emisiones muy bajos que permiten calificarlo como de Energía Casi Nula (EECN). Además, está en vías de obtener la certificación ambiental  BREEAM Excelente. Se trataría del primer edificio con esta calificación en Aragón.

Estos valores tan destacados se obtienen gracias a un buen diseño y a la implantación de toda una gama de tecnologías innovadoras que se complementan para obtener las mejores prestaciones en todas las épocas del año y frente a situaciones variables de la demanda. Por ejemplo, hay unos intercambiadores geotérmicos denominados pozos canadienses que permiten atemperar el aire del exterior antes de introducirlo en el edificio, lo que permite obtener un beneficio energético sin coste económico.

La incorporación de paneles fotovoltaicos híbridos alimentan de forma igualmente gratuita, una máquina de adsorción capaz de refrigerar aprovechando la radiación solar. Un depósito de inercia permite, también, almacenar energía en forma de calor para su aprovechamiento interestacionalAerotermia y geotermia a ciclo abierto completan las tecnologías mas avanzadas.

La producción de energía eléctrica proporcionada por los paneles fotovoltaicos se prevé que alcance los 150.000 KWh/año (equivalente al consumo de 50 viviendas). El diseño del edificio y los materiales empleados han sido considerados bajo principios de sostenibilidad ambiental. Un ejemplo llamativo es la utilización de corcho en el aislamiento de las fachadas del atrio o la cubierta mediante estructuras vidriadas practicables.

PROCESO DE LICITACIÓN

En estos momentos, están en proceso de licitación las instalaciones de telecomunicaciones -wifi y conexiones de datos-, el mobiliario y la restauración y reintegración de elementos patrimoniales -lienzos del depósitos del Museo del Prado, muebles de Loscertales, objetos de valor patrimonial como medallas, monedas…- y de los espacios saludables.

La licitación y suministro del equipamiento determinará fecha de plena operatividad del edificio. Se está trabajando para que la Facultad pueda estar en funcionamiento a lo largo del primer cuatrimestre del curso 2023-24.