La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha defendido la autonomía del Consejo Escolar del colegio Cesáreo Alierta de Zaragoza y la decisión que tomó este órgano en junio sobre el cambio de horario.

En un comunicado, el sindicato ha explicado que, entonces, se aprobó la reducción del periodo intersesiones y se fijó un nuevo horario de 9.00 a 12.30 y de 14.30 a 16.00. Sin embargo, un grupo de familias se opuso y llevó el cambio a los tribunales.

En octubre, ha continuado CSIF, se aprobaron medidas cautelares y se volvió al horario anterior –de 9.30 a 12.30 y de 15.30 a 17.00 horas– y el viernes pasado se conoció la sentencia que confirma las medidas cautelares.

«El Consejo Escolar es el máximo órgano de representación de la comunidad educativa, según marca la ley, y en él participan profesores y representantes de las familias elegidos democráticamente. Defendemos la autonomía y la representatividad del Consejo Escolar», ha subrayado la responsable de Educación de CSIF Aragón, Mónica de Cristóbal.

«Lamentamos profundamente que la opinión de un grupo de familias haya prevalecido sobre la decisión del Consejo Escolar«, ha agregado. Asimismo, CSIF ha manifestado que apoya a las familias y a los docentes que votaron la reducción del periodo intersesiones y ha criticado que se están primando los intereses económicos de las asociaciones de padres y de las empresas que gestionan las extraescolares, además de acusar a la DGA «de lavarse las manos en este proceso».