La FIBA Europe Cup se ha convertido en la pesadilla de Casademont Zaragoza en este inicio de temporada. El equipo aragonés afrontaba la competición europea con la ilusión de repetir los éxitos vividos en la Champions League en un torneo mejor, en el que se fijó como objetivo llega a ser campeón.

Publicidad

La temporada en Europa ya arrancaba de una forma extraña para el equipo de Ponsnarnau que tuvo que disputar los 3 primeros partidos lejos de Zaragoza, visitando Rusia, Israel e Italia. Cosechó dos derrotas y una victoria en estos tres primeros encuentros.

Se la jugó la pasada semana en el partido que le enfrentaba al Hapoel Gilboa Galil y el club rojillo fallaba de forma estrepitosa. Ganar al conjunto israelí tampoco habría servido para nada, ya que Reggio Emilio lograba ganar su partido contra el Avtodor Saratov, pero Casademont se empeñó en quedar eliminado por la puerta grande, perdiendo contra el rival más flojo del grupo.

El equipo se despide este miércoles de la FIBA Europe Cup con la visita del Reggio Emilia, que se juega ser primero de grupo, mientras que Casademont se tomará el partido como un entrenamiento de alto nivel de cara a centrar todos sus esfuerzos en la Liga Endesa.

Jaume Ponsarnau hablaba así sobre el partido que juega su equipo este miércoles. “Nos gustaría más entrenar que jugar el partido, porque estamos decepcionados. Hay que jugarlo y pasar página de una competición en la que hemos competido muy mal”.

El técnico del conjunto rojillo también hablaba de lo mal que ha sentado la eliminación de la competición europea. “Me ha sabido muy mal por el club y los aficionados que nos hayan eliminado, porque veía que había mucha ilusión por la competición”, afirmaba Jaume Ponsarnau.

El choque dará comienzo a las 20h en el Príncipe Felipe, en el último encuentro europeo de la temporada.