La Consejería de Vertebración del Territorio del Gobierno de Aragón ha puesto en marcha la elaboración de una Directriz Especial del Paisaje para su protección, gestión y promoción que incluirá medidas compensatorias por la pérdida de calidad y que estará lista en otoño de 2022.

Esas son las previsiones de Vertebración del Territorio en una tramitación abierta a las aportaciones de la ciudadanía. Según fuentes del gobierno aragonés, será una herramienta para la protección y gestión del paisaje, entendido como cualquier parte del territorio, también la urbana, desde una posición compatible con la actividad económica y las demandas sociales y que afectará por tanto a cualquier actividad que se quiera desarrollar, desde las energías renovables a una carretera.

No se trata en todo caso de incorporar nuevas regulaciones a la tramitación en la implantación de actividades, sino de hacer efectiva y concreta la normativa que ya existe sobre el tratamiento del paisaje. Estas fuentes aseguran que la redacción de esta directriz parte de una sola sensibilidad del cuatripartito y, respecto de las renovables, los cuatro socios de Gobierno (PSOE, Podemos, CHA y PAR) tienen clara su apuesta sin detrimento del paisaje por una cuestión identitaria y económica.

Entre las medidas preventivas, estará la decisión de la ubicación de una infraestructura que afecte al paisaje para que la última opción sean las medidas compensatorias por la pérdida de calidad del paisaje, que pueden ser variadas y que no ha querido adelantar a expensas de las propuestas que puedan plantearse en los periodos de información pública.

En todo caso, la redacción de esta directriz parte del objetivo de dar cumplimiento a la Estrategia de Ordenación Territorial de Aragón y al Convenio Europeo del Paisaje ratificado por España, así como incentivar en los habitantes del territorio la importancia patrimonial e identitaria del paisaje y ante la previsión de que experimente una importante transformación a corto plazo.

Como ejemplo, de los 178 informes que se elevan al Consejo de Ordenación del Territorio de Aragón, el 93 % tienen que ver con las instalaciones de energías renovables, que transforman el paisaje. Para desarrollar el Convenio Europeo del Paisaje se impulsaron ya los 33 Mapas de Paisaje con los que cuenta Aragón en los que se identifican y califican sus características, fuerzas y presiones que los transforman y se definen los objetivos de calidad paisajística.

La directriz deberá establecer tres líneas de trabajo, entre ellas la protección del paisaje con la redacción de estrategias y normas que permitan mantener la calidad de los mejor valorados, con la creación de la figura de la «red de paisajes sobresalientes de Aragón», para poder establecer restricciones en las actuaciones que se pretendan llevar a cabo, la obligatoriedad de realizar estudios de impacto paisajístico y las compensaciones que sean necesarias.

Por otro lado, deberá establecer cuándo es necesaria la redacción de planes de recuperación de paisajes degradados y todas aquellas medidas que sirvan para el mantenimiento y el incremento de la calidad del paisaje, que se pueden traducir en subvenciones, inversiones o contratos de custodia del territorio.

Además, entrará en la ordenación de los paisajes, es decir, establecer los plazos y circunstancias como incendios o instalación de grandes infraestructuras que obligarán a la revisión de los Mapas de Paisaje. Para desarrollar la integración del paisaje se tendrá en cuentan objetivos de calidad paisajística a la hora de realizar el planeamiento territorial, urbanístico y sectorial.

La actividad urbanística deberá integrar la consideración de paisajes y se tendrá que tener en cuenta a la hora de redactar las determinaciones de los Planes Generales de Ordenación Urbana en materia de paisaje. Otra de los objetivos es la integración del paisaje urbano y periurbano en el planteamiento urbanístico.

Entre ellos, tendidos eléctricos, aerogeneradores y antenas de telecomunicaciones, instalaciones de generación de energía de origen fotovoltaico o termosolar; infraestructuras de transporte como carreteras, ferrocarril y aeropuertos, nuevos desarrollos urbanísticos; embalses y grandes presas o minería a cielo abierto. Por último, se trabajará en la promoción del paisaje aragonés con acciones como la sensibilización, formación y educación en materia de paisaje, creación de itinerarios, redes de miradores o paisajes del agua.

Una vez aprobado el inicio de la tramitación de la directriz el pasado 26 de octubre por el Consejo de Gobierno, comienza su redacción con diversos pasos que incluyen consultas a la ciudadanía y diferentes procedimientos internos de carácter obligatorio, como la preparación del Documento de Alcance a través del INAGA y la elaboración del Estudio Ambiental Estratégico, de forma que el texto definitivo esté antes del verano y se apruebe para otoño de 2022.