La alta inflación y la incertidumbre ya se dejan notar en los datos: la economía aragonesa da nuevas muestras de desaceleración, si bien los indicadores resisten en valores positivos, tanto en el mercado de trabajo como en los distintos sectores económicos. Esta desaceleración se concreta en una previsión de la tasa de crecimiento del PIB del 3,9% en 2022, que en 2023 alcanzaría el 2%.


Publicidad


Los datos se extraen del estudio de Perspectivas de la Economía Aragonesa promovido por el Programa ARIES Aragón Impulso de Empresas, fruto de la colaboración de Cámara Zaragoza con el Gobierno de Aragón. El informe, que elabora ESI Economic Strategies and Initiatives, ha sido presentado a los medios de comunicación por el director general de Cámara Zaragoza, José Miguel Sánchez, y el catedrático de Análisis Económico de la Universidad de Zaragoza y director del estudio de ESI, Marcos Sanso.

El boletín de coyuntura realiza una completa radiografía del momento y las perspectivas de la economía aragonesa. En el nuevo contexto de alta inflación se percibe cierta desaceleración, pero sin afectar seriamente a la actividad ni al empleo que mantienen todavía un ritmo satisfactorio. La previsión de crecimiento del PIB para 2022 apunta en la actualidad al 3,8% en España y al 3,9% en Aragón. Para 2023 las tasas se ven más afectadas, siendo del 2% en Aragón y del 1,8% en España.

La previsión de la tasa de paro en Aragón es del 9,56% en 2022 y del 9,15% en 2023, lo que supone un empeoramiento respecto a las previsiones de febrero al disminuir la previsión de crecimiento. En España las previsiones son del 13,44% en 2022 y del 13,34% en 2023. Se nota especialmente que las tasas de crecimiento del PIB en 2023 no son suficientes para reducir la tasa de paro.

La invasión de Ucrania por parte de Rusia echó por tierra la posibilidad de normalizar la inflación en primavera y España ha pasado de una tasa de inflación del 6,5% anual en diciembre de 2021 al 10,2% en junio de 2022.

Estas previsiones suponen que Aragón no recupera los niveles de PIB de 2019 en 2022 (98,15%) y que España no lo hará ni en 2023. En dicho año Aragón estará exactamente en el valor de 2019 y España aún estará por debajo (98,86%). Es importante recordar este dato porque todavía estamos recuperando terreno perdido y se tardará bastante en volver a la senda de largo plazo que se abandonó en 2020.


Publicidad


No obstante, el director de Cámara Zaragoza, José Miguel Sánchez, quiso trasladar un mensaje optimista pues “aunque hay desaceleración no va a haber recesión, y la economía aragonesa va a crecer por encima de la española”. Sánchez resaltó como mayor preocupación la inflación, por lo que “en Cámara creemos imprescindible un pacto de rentas antes de que acabe el ejercicio, que precisará de un esfuerzo nacional de trabajadores, empresarios, administraciones y pensionistas con rentas altas”.