Ibercaja ha dejado clara su intención de recurrir el impuesto temporal a la banca, al considerar que es «injusto, arbitrario y contraproducente«, según ha trasladado el consejero delegado de la entidad, Víctor Iglesias, en una entrevista para ‘KPMG Tendencias’.

La entidad está actualmente preparando el recurso, que deberá pasar por el consejo de administración para ser aprobado, según han indicado fuentes de la entidad a Europa Press. Sin embargo, como ya adelantase en noviembre del año pasado, mantiene su intención de impugnarlo una vez ha abonado el pago anticipado.

Iglesias también considera que la tasa «contraviene principios tributarios, jurídicos y de competencia» y defiende que el sector bancario «sí que arrima el hombro. «La banca tiene un tipo marginal del impuesto de sociedades mayor que el resto de empresas, de un 30%, no nos deducimos los gastos soportados de IVA y nuestra tasa fiscal efectiva está por encima del 50%«, afirma.

Con respecto a las deducciones fiscales del sector, Iglesias sostiene que son «legítimas» al ser por pérdidas del pasado y que la tasa efectiva para 2022 será del 28%.

«Además, estamos siempre dispuestos a ayudar a los colectivos y clientes más vulnerables: moratorias hipotecarias, código de buenas prácticas, créditos ICO, etc», manifiesta el consejero delegado. También recuerda que los bancos con fundaciones como accionistas devuelven a la sociedad gran parte del dividendo. «Somos un banco con sensibilidad social y territorial«, concluye al respecto.

DESCARTA UNA «AVALANCHA» DE INSOLVENCIAS

Durante la entrevista, Iglesias también realiza un balance de los resultados de 2022, a falta de conocer los datos concretos. Afirma que ha sido un ejercicio «francamente muy bueno«, con una positiva dinámica comercial tanto en financiación a empresas, como en hipotecas.

Asimismo, se muestra contento con el área de gestión del ahorro donde, a pesar del «complejo» entorno, con una volatilidad «enorme» en los mercados, el banco ha conseguido tener aportaciones netas positivas tanto a fondos de inversión, como a planes de pensiones. «Somos los quintos del mercado en gestión de activos, con una cuota que duplica nuestro tamaño como banca comercial», indica.

Igualmente, estima positiva la evolución de la morosidad, que se ha contenido y reducido hasta el 1,6% a cierre de año, nivel que no se registraba desde 2007. De esta forma, el retorno sobre el capital tangible (RoTE) del negocio minorista se ha situado en el 7,6%, una «buena cifra», pero que todavía está por debajo del coste de capital.

«Los beneficios del ejercicio no son caídos del cielo, ni vienen por situaciones extraordinarias, ni tampoco del Euríbor, son fruto de un acierto estratégico, capacidad de ejecución y trabajo colectivo de los últimos ocho años», defiende Iglesias.

Con respecto a las perspectivas para este año, cree que se registrarán mayores problemas entre las empresas que en las familias y señala que la morosidad dependerá de hasta dónde lleguen los tipos de interés. «No es lo mismo que estén al 3% que al 5%, porque la capacidad de resistencia de los deudores se va doblegando». Sin embargo, aleja la posibilidad de una «avalancha de insolvencias».

«AHORA ESTAMOS EN NUESTRO MEJOR MOMENTO»

La entrevista también aborda la posibilidad de un nuevo recorte de la plantilla. Iglesias recuerda que, desde que fue nombrado consejero delegado en 2015, Ibercaja ya ha acometido tres ERE, que han afectado un 30% de la plantilla. «Ahora estamos con una dimensión adecuada, tras la relevante reestructuración de estos años», explica al respecto.

En cuanto a una posible fusión con otra entidad ante las peticiones por parte del Banco Central Europeo (BCE) de mayor concentración en el sector, Iglesias considera que la hoja de ruta presentada al supervisor «siempre pasa por la independencia». «Somos y queremos seguir siendo un banco minorista nacional con sede en Aragón. Ahora estamos en nuestro mejor momento», afirma el CEO de Ibercaja.

En este sentido, expone que la entidad ha mejorado «muchísimos» sus indicadores y para 2023 prevé una rentabilidad del 9%, muy próxima al coste de capital, «la mayor garantía de independencia de un proyecto corporativo».

SALIDA A BOLSA

Con respecto a la posible salida a Bolsa de Ibercaja, una cuestión que ha sobrevolado al banco durante los últimos años como una de las vías para cumplir con la Ley de Cajas y Fundaciones Bancarias, Iglesias afirma que se realizará «cuando convenga» al proyecto del banco y se reconozca «el valor real» de la entidad «sin la presión del plazo».

En este sentido, cabe recordar que a mediados de 2022, Ibercaja optó por la creación de un fondo de reserva, de tal manera que se liberaba de la fecha límite del 31 de diciembre de 2022 para salir a Bolsa, un procedimiento que se incluía en la Ley de Cajas de Ahorro y Fundaciones Bancarias para reducir las participaciones de las fundaciones en las antiguas cajas de ahorro por debajo del 50%.

La normativa contempla que haya fundaciones que tengan una participación superior al 50% en estas entidades, si bien obliga a la elaboración de un plan de diversificación de sus inversiones para minimizar riesgos y constituir este fondo de reserva para garantizar la financiación del banco en situaciones de dificultades.