Dar un paseo a media tarde o disfrutar de una buena charla en compañía son pequeños hábitos que para las personas mayores marcan la diferencia en su día a día. Cuando se alcanzan ciertas edades y, sobre todo si se vive solo y ya no se tienen las mismas facultades físicas, los días suelen hacerse largos y pesados. Para combatir estos momentos y no caer en la monotonía, Ayuda a Domicilio en Zaragoza (ADOZ) cuenta con profesionales que prestan este servicio de acompañamiento por las tardes.
Se pueden contratar para una o dos horas y puede ser desde salir a la calle a dar un paseo o hacer algún recado hasta estar un rato en casa con el usuario, haciéndole compañía y charlando. Además, para los más dependientes, también se puede optar por el servicio de preparación de la cena y, posteriormente, la ayuda para acostarse, a última hora del día.
Esta atención vespertina forma parte de un amplio catálogo de servicios que ADOZ presta para que los familiares que lo necesiten dispongan de los mejores cuidados en su propio hogar. Todas las funciones las realiza personal cualificado que, gracias a las actuaciones de tipo preventivo, formativo, asistencial y rehabilitador tratan de mejorar la calidad de vida del usuario. Al mismo tiempo, se busca promover la autonomía suficiente para que, siempre que las circunstancias lo permitan, puedan realizar con más o menos soltura sus actividades cotidianas. Como extra, estos objetivos se consiguen sin que la persona mayor tenga que desplazarse a una residencia o centro asistencial, tratando de que permanezca el máximo tiempo posible en su entorno habitual.
CÓMO TRABAJAN LOS PROFESIONALES DE ADOZ
Antes de iniciar cualquier servicio, tanto los de mañanas como los de tardes, un profesional de ADOZ visita el domicilio del usuario. Tras una primera entrevista para conocer a la persona y su entorno, se procede a elaborar un informe por un profesional del ámbito sanitario donde se analizan los recursos más adecuados a cada situación particular. Una vez estudiado el caso, se presenta a la familia la mejor solución, adaptándola a esa necesidad específica.
Dentro de este concepto de atención personalizada, los servicios se pueden contratar tanto a cuidadores externos que pasan ciertas horas al día en casa de la persona a cuidar, como a internos, que se alojan en el domicilio y están con el usuario las 24 horas. Además, aunque la mayor parte de los usuarios son personas mayores, en ADOZ también se presta ayuda de rehabilitación y postoperatoria a pacientes de cualquier edad. Igualmente, la atención se puede prestar fuera de casa. Sucede en caso de hospitalización del usuario, cuando una persona cualificada puede quedarse con él tanto por el día como por la noche.
Y si cuidar a quienes lo necesitan es importante, no lo es menos cuidar a los que cuidan. En este sentido, en ADOZ no se olvidan de los propios familiares. Por eso, también se presta apoyo a esos cuidadores no profesionales, habitualmente hijos de los usuarios, que suelen necesitar cierto apoyo al adquirir un nuevo rol que supone un cambio de vida. En algunos casos, esto puede suponer incluso problemas físicos, cansancio o experimentar situaciones de tristeza, estrés y ansiedad. Este desgaste emocional y físico se denomina sobrecarga o síndrome del cuidador y, para evitarlo, entre los objetivos de Ayuda a Domicilio en Zaragoza también está proporcionar un descanso al cuidador a través de su servicio de apoyo.
* Más información y contacto con ayudadomicilioenzaragoza.com