El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, anunció este miércoles que en 2023 las tarifas del transporte urbano seguirán congeladas para «ahorrarles a los usuarios 4 millones de euros». La decisión es fruto de «la necesidad de seguir promocionando el servicio» y como «una retribución justa» por los perjuicios de la huelga que mantienen los trabajadores del autobús urbano desde hace más de 20 meses, como ha apuntado Azcón en el último debate del mandato sobre el estado de la ciudad.
Una huelga que el actual alcalde atribuye al anterior Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) por «haber prometido irresponsablemente en campaña electoral iniciativas imposibles de cumplir» y en la que el actual «ha ejercido su responsabilidad para asumir una oferta avalada por el Servicio Aragonés de Mediación que supone un sobresaliente esfuerzo para las arcas públicas, que son finitas y deben atender numerosas necesidades».
Azcón ha subrayado, no obstante, su intención de seguir trabajando para defender los intereses de los vecinos de Zaragoza y «su derecho a no tener cercenado un servicio público esencial» que, ha lamentado, se mantiene con entre un 20 y un 15 % de pasajeros por debajo de las cifras de 2019, que el alcalde ha atribuido también a los efectos de los paros.
El alcalde ha recordado que la ciudad ya subvenciona a través de sus presupuestos un 70 % del coste del servicio público de transporte frente al 50 % de antes de la pandemia y supone un 42 % más de presupuesto que en 2015. Un esfuerzo que se suma a la renovación de la flota, que en dos años tendrá un tercio de vehículos 100 % eléctricos y otro tercio de híbridos, lo que supondrá que en 2024 presten servicio 112 las unidades completamente eléctricas y 111 las híbridas.
En cuanto al tranvía, ha anunciado que están ya encargadas las dos nuevas unidades que en 2024 permitirán ampliar en un 10 % la capacidad de la línea. También se ha iniciado la contratación mediante concesión de la instalación de 37 puntos de recarga de coches eléctricos, a lo que se han presentado 14 empresas cuyas ofertas se encuentran en proceso de valoración.
La movilidad sostenible se ha extendido a lo largo del mandato con la incorporación de concesiones para 840 bicis, 1.200 patinetes y 900 ciclomotores y en 2023 está prevista la licitación de un nuevo pliego de bicicleta pública con estaciones fijas que sustituirá al sistema BIZI.
Se pondrán a disposición de los vecinos 2.180 bicis eléctricas con 218 estaciones repartidas por toda la ciudad que duplican la capacidad del actual sistema.