El Colegio El Pilar Maristas de Zaragoza vuelve a estar en el centro de la polémica por otro supuesto caso detectado de abusos sexuales de un religioso. Este segundo religioso, investigado por presuntos abusos sexuales, dio clases entre los años 2009 a 2011, y el colegio no subo de su historial hasta tiempo después de abandonar la institución.

Fuentes del Colegio el Pilar Maristas de Zaragoza confirman que no hay constancia de ninguna denuncia durante su estancia en el colegio. Los presuntos abusos por lo que está siendo investigado se dieron en otra institución y en otra ciudad. Las investigaciones sobre dos religiosos de la institución Maristas prolongan las dudas existentes sobre si hubo más religiosos que estaban siendo investigados.

En el caso del primer religioso denunciado, y que el colegio zaragozano decidió apartarlo del contacto con menores al conocer su historial, impartió clases en la institución durante seis años en Educación Secundaria y Bachillerato. El colegio Pilar Maristas lo apartó hace menos de tres meses. Este religioso acusado por presuntos abusos era conocido en el Colegio zaragozano por un apodo que hace referencia al exceso de sobar o tocar superficialmente a los jóvenes, tanto hombres como mujeres. De hecho, este religioso ocupó cargos de responsabilidad dentro de la jefatura provincial de la institución marista. Según información publicada, es originario de Burgos y ejerció de profesor en Guadalajara y Madrid tanto como docente como coordinador de pastoral.

A las familias del colegio de El Pilar Maristas de Zaragoza se les envió un comunicado el martes donde se explicaban todos los hechos y el proceso de investigación. Los alumnos fueron también conocedores de esta expulsión y, según fuentes internas del colegio, a algunos de ellos no les sorprendió cuando conocieron la información. Los delitos de los que se le acusa al primer religioso, que lleva las iniciales A.A, hacen referencia a unos hechos sucedidos entre los años 80-90 en otro colegio de otra ciudad. 

En un comunicado piden «perdón a las víctimas por no haber sido capaces de protegerles, cuidarles y manifestamos nuestra condena a estos terribles hechos». Además, señalan que en cuanto tuvieron conocimiento de la acusación «fue apartado del contacto con menores» tal y como dispone «nuestra Política provincial de protección del menor» y aclaran que han abierto una investigación y puesto a disposición de los menores un correo (protecciondelmenor@maristasiberica.com)

Por otra parte, sobre las investigaciones en procesos judiciales, los tribunales aragoneses están tramitando a día de hoy dos causas por presuntos abusos sexuales en instituciones religiosas. Según fuentes de la Fiscalía Superior de Aragón, es un caso instruido en Zaragoza y otro en Huesca. Este último es de un sumario incoado en 2019 y aún está en proceso de instrucción.