Hace cinco años que Lorenzo Mariano Nieto desapareció del centro neuropsiquiátrico Nuestra Señora del Carmen, en Garrapinillos, donde estaba ingresado. Fue un once de abril de 2017, desde entonces, ni su mujer, María Peña, ni nadie de su familia lo ha vuelto a ver, y lo que es peor, no han podido siquiera enterrar su cuerpo.

Lorenzo Nieto padecía una fuerte depresión con ideas autolíticas que en su familia ya no podía controlar, según cuenta María Peña, la mujer del hombre desaparecido, en una carta a la que ha tenido acceso este periódico. María nunca pudo olvidar aquel episodio. En junio de 2020, la Audiencia Provincial de Zaragoza ratificaba la condena de un juzgado de lo Contencioso Administrativo al centro neuropsiquiátrico «por no haber cumplido con su función de vigilancia y custodia». El médico que lo trataba decidió aquel día de la desaparación de Lorenzo cambiar su régimen, y esa tarde, en torno a las 17:00 horas, su paciente salió en pijama, bata, zapatillas y medicado con ansiolíticos y antidepresivos y nada se volvió a saber de él.

El facultativo salió absuelto al entender el juez que nada tenía que ver el tratamiento indicado con la posterior desaparición de este zaragozano. Condenaron al Centro de Garrapinillos a 170.000 de compensación para María y su hijo, y ahí se quedó todo.

Cinco años después, siempre para la misma fecha, María Peña escribe y se acuerda de su marido, y pide que a nadie le vuelva a pasar lo que le pasó a su familia. «Tras lo que hemos vivido estos últimos años podemos comprobar el mal estado de nuestro sistema sanitario y, sobre todo, de los recursos, departamentos y unidades destinadas a cuidar de los pacientes con enfermedades de carácter psiquiátrico y psicológico», critica María en su carta.

«Posteriormente a la desaparición de mi marido, hablé con el Director General del Salud y me aseguró que iban a realizar una inspección al centro, pero cuál fue la sorpresa, que años después durante el juicio nos enteramos que no se había realizado ninguna inspección«, relata en su escrito la mujer de este hombre desaparecido.

«NADIE ME HA PREGUNTADO CÓMO ESTAMOS»

María señala a este centro de Garrapinillos y no se explica cómo nadie ha tomado cartas en el asunto. «Por todo esto me siento indignada. A mí no me ha contactado nadie para ver qué tal estamos, ni el centro, ni la Administración, ni los médicos ni las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que se encargaron de la búsqueda de mi marido», explica en la carta que ha entregado a HOY ARAGÓN.

«El juicio lo acabé ganando, pero el dinero no soluciona nada», cuenta. También escribe en su carta que ese patrimonio está judicializado. La juez decretó que se abonase de forma fraccionada a los largo de los siguiente diez años a la desaparición de Lorenzo, al ser el plazo legal en el que se puede declarar fallecida a una persona desaparecida.

Esta carta acaba con una reflexión que hace María: «Cada vez que pagamos más impuestos y los servicios más importantes van a peor cuando debería ser al revés, ¿qué hacen las administraciones con ese dinero? ¿Cuándo se va a dar la atención que merece a las enfermedades mentales en un país en el que fallecen más personas por suicidio que por accidentes de tráfico?». En la última línea se puede leer, «muchas gracias por escucharme». Firmado, María Peña Ferrer, quien asegura que no va a olvidar a su marido ni lo que pasó aquel 11 de abril de 2017.