Los sindicatos policiales Jupol y SUP han reclamado al Gobierno que apoye a la Policía ante las últimas agresiones sufridas por un inspector y un subinspector en Zaragoza y han reivindicado que se endurezcan las penas», ya que «sale muy barato» agredir a un agente.

Lo han pedido en una concentración a las puertas de la Jefatura Superior de Policía de Aragón tras las agresiones sufridas durante la semana del Pilar por un inspector al pedirle a un usuario de un autobús que se pusiera la mascarilla y un subinspector destinado en Tudela al querer aparcar su vehículo.

En declaraciones a los medios, Antonio Alijarde, secretario de asuntos jurídicos de Jupol en Zaragoza, ha confirmado que el sindicato se personará como acusación popular por los altercados tras un botellón la madrugada del día 12 que acabó con 18 detenidos, cinco de ellos menores, y por las agresiones a los dos compañeros que estaban fuera de servicio.

«Parece ser que se está tomando como diversión agredir a la policía», ha denunciado Alijarde, quien ha hecho hincapié en que el principio de autoridad «está totalmente mellado», en que debería recuperarse y el Ejecutivo «apoyar a su Policía y condenar este tipo de hechos», porque una parte no lo hace y las agresiones a agentes, según ha dicho, han crecido en los últimos años entre un 20 y un 25 por ciento.

También ha reclamado a los jueces que en lugar de multar por hechos de este tipo impongan penas de prisión. «Las agresiones a los policías salen muy baratas» y por tanto, ha reivindicado que los agentes sean considerados como «autoridad», y que aumentan las sanciones y penas. En ese sentido, ha indicado que el sindicato impulsará una reforma legislativa para intentar endurecer las penas por delitos de atentando y resistencia grave como «autoridad misma», no como agentes de la autoridad.

Por su parte, el secretario provincial de SUP en Aragón, Ángel Mena, también ha condenado «tajantemente» las agresiones sufridas por los dos policías y ha confirmado que el sindicato, por medio de la abogada Pilar Sangorrín, se personará como acusación particular por delitos de odio en las dos agresiones. Para Mena, se ha perdido el principio de autoridad y los agentes carecen de respaldo institucional, ni del ministro de Interior, Fernando Grande Marlaska, ni de los partidos.

Ha lamentado además que la crispación que se vive en España tampoco ayude a esta situación y que haya partidos como ERC que acusen a la Policía de «todo tipo de tropelías», al tiempo que ha reclamado que aumenten las penas por delito de atentado contra un agente de la autoridad y que se cumplan las penas.