El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, ha instado este jueves a las instituciones aragonesas a fijarse en el modelo de colaboración desarrollado en Bilbao para la construcción del nuevo estadio de San Mamés como ejemplo «de éxito» a seguir en Zaragoza, tras varios fracasos, con el estadio de la Romareda.


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Acompañado por el consejero municipal de Urbanismo y Equipamientos, Víctor Serrano, y por el presidente del Real Zaragoza, Christian Lapetra, Azcón ha visitado el estadio de San Mamés, que ha calificado como «impresionante y un campo del siglo XXI«, para conocer «in situ» la fórmula de colaboración que permitió que se convirtiera en realidad la aspiración de crear un nuevo estadio en la capital vizcaína.

Una fórmula que, en el caso del estadio bilbaino, consistió en la creación de una sociedad (San Mames Barria) compuesta por cinco socios: el Athletic Club; el Gobierno Vasco, la Diputación Foral de Vizcaya, el Ayuntamiento de Bilbao, y Kutxabank, que aportaron 50 millones de euros para la financiación del nuevo estadio, ubicado en las proximidades del antiguo y que aprovecha incluso una de sus gradas, a excepción del consistorio que sumó 11 millones aunque completó su contribución con tasas e impuestos.

UN EJEMPLO DE ÉXITO

San Mamés, con una superficie de 21.000 metros cuadrados y un coste total de 173 millones de euros, fue inaugurado en su primera fase el 16 de septiembre de 2013 y cuenta con un capital social de 178.060.000 euros y una participación del 24,99 por ciento de todos los socios excepto del Ayuntamiento, que es del 0,03 %.

El alcalde de Zaragoza ha recordado este jueves los «tres proyectos fallidos» para reformar la Romareda y ha incidido ante los medios en Bilbao en que lo importante es el acuerdo alcanzado entre las instituciones públicas involucradas, el club de fútbol y una entidad bancaria para convertir en éxito San Mamés y lograr un campo «espectacular».

El Estadio de San Mamés / Dani Marcos / Ayuntamiento de Zaragoza

No solo desde el punto de vista deportivo sino también de seguridad y accesos y para la celebración de otros eventos que lo han convertido, a su vez, en un «motor económico y dinamizador» más de la ciudad y en el tercer museo más visitado tras el Guggenheim y el de Bellas Artes, lo que tiene que ser también «un ejemplo» para la capital aragonesa, donde la reforma de la Romareda es «uno de los proyectos más importantes de estos próximos cuatro años».

Azcón ha añadido que la explotación de San Mamés es «un revulsivo» y un «acicate» para la sociedad, para el equipo y el entorno y que el hecho de que esté en la ciudad, como la Romareda en otro paralelismo, «es bueno».

Aunque la fórmula elegida en Bilbao fue la sociedad, «no es la única», ha dicho el alcalde, para quien la nueva Romareda será un éxito si existe «voluntad de colaboración» y ha resaltado como «ventajas» de la sociedad que permite al club tomar parte en las decisiones al tiempo que refleja un modelo de cooperación.

¿CÓMO SE FINANCIA?

Preguntado por cómo se abonaría esta reforma en Zaragoza, de la que no se han dado cifras, el alcalde ha insistido en que debe ser con la fórmula «pública-privada«, porque la situación del ayuntamiento zaragozano es mala y ha llamado a la participación de otras administraciones para hacer «el mejor campo».

Ha resaltado la «buena disposición» del presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, con quien las conversaciones van «por buen camino» y confía en que «fructifiquen» y el Ejecutivo ponga «todo de su parte», pero también se ha mostrado prudente hasta que los pasos sean «sólidos».


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Sí ha avanzado en este sentido que este viernes se firmará el convenio entre el Ayuntamiento de Zaragoza y el Real Zaragoza en el que se podrán avanzar más detalles de esta futura colaboración.

Por su parte, el presidente del Real Zaragoza ha destacado la visita a San Mamés, estadio que ya conocía como equipo visitante, para poder «tomar ideas» y aportar «experiencia y conocimiento» para la nueva Romareda, que tendrá que ser «estudiada» por las administraciones.

El interés del club, ha dicho Lapetra, es «construir y crecer», por lo que junto al consenso social es importante que exista el «político» y el Real Zaragoza «ayudará«. Lapetra ha aplazado a mañana, en la firma del convenio con el Ayuntamiento, los detalles de esa aportación.


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Sí ha detallado que le gustaría una Romareda acorde al fútbol profesional, a sus necesidades y requisitos deportivos, un equipamiento con duración en el tiempo, que prevea las necesidades actuales y futuras, accesos homologados, sin barreras arquitectónicas, seguridad y con usos comerciales e incluso terciarios.

«En eso tenemos que trabajar», ha concluido Lapetra, quien ha desvinculado la nueva Romareda del ascenso del Real Zaragoza a Primera División, a la que intentarán llevar al equipo, aunque todo tiene que ir «en paralelo»

*Vea aquí los planos de la ‘nueva’ Romareda que propuso en campaña electoral el actual alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón