Las EFAS (Escuelas Familiares Agrarias) cumplen su 50 aniversario, y se mantienen al igual que en su nacimiento, como una institución educativa con un firme propósito: impartir formación profesional, cultural y humana a las personas del ámbito rural.
Este sábado celebraron sus bodas de oro por todo lo alto. Casi mil personas entre alumnos, exalumnos, familias, profesores, directivos y personal que ha hecho posible este medio siglo de vida abarrotaron el WTC de Zaragoza.
Inauguró el evento, Arturo Aliaga, Vicepresidente del Gobierno de Aragón incidiendo en “la necesidad de una educación y formación a los jóvenes en el mundo rural donde, además, puedan desarrollar su labor profesional”.
Las EFAS fueron, ya desde sus comienzos, pioneras en dos hitos de máxima actualidad: la formación dual, tan famosa los últimos años en el ámbito de la FP (actualmente Grado Medio y Grado Superior), y que consiste en alternar la formación teórica con el desarrollo de las prácticas durante el curso; y en segundo lugar, por su voluntad de sacar adelante el medio rural que, ya desde entonces, veía la amenaza de convertirse en lo que ahora se conoce como la España Vacía. Ese fantasma de la despoblación que ataca a tantos territorios de Aragón y del país.
Unas bodas de oro para celebrar un éxito educativo/ EFAS
Más de 6.000 alumnos han pasado por sus manos en estos 50 años de existencia, 4.000 anualmente en España. Media vida formando personas en lo que significó una auténtica “revolución formativa” en aquellos años.
Gestión forestal, higiene bucodental, enfermería, producción agropecuaria, educación infantil y un largo etcétera completan una oferta educativa que es un referente para todos aquellos aragoneses que necesitan una formación con la que sacar adelante la empresa familiar, emprender un negocio en su localidad o, en definitiva, llenar de vida el Aragón rural.