Una fatalidad ha sido el promotor de la última decisión adoptada por el Ayuntamiento de Zaragoza. La plaza Salamero del centro de la capital aragonesa será reformada íntegramente tras el hundimiento del aparcamiento subterráneo. 

Así lo ha recalcado el alcalde Jorge Azcón: Es una «oportunidad» para acometer un cambio de toda la plaza y no conformarse con una «chapuza». Por el momento, se están estudiando las causas que provocaron la cesión del forjado, así como determinar las responsabilidades.


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Lo único que ha adelantado el alcalde Azcón, sobre esa futura reforma, es que le gustaría que quedara una plaza «lo más bonita» que se pueda y que se respetaran los árboles allí existentes. Se desconoce la idea inicial que maneja el Ayuntamiento o el mismo área de Urbanismo del consistorio. Por un inicio, es un avance que aplauden las asociaciones vecinales del entorno por ser una demanda pedida desde hace años.

UN VALLADO DEFINITIVO

La plaza Salamero de Zaragoza permanece, por el momento, cerrada al público con un vallado perimetral durante todo el recinto. Según fuentes municipales, los coordinadores de las tres áreas municipales están involucradas para buscar una solución definitiva tras el hundimiento de parte del forjado del parquin subterráneo.

Los técnicos municipales trabajan en la elaboración de los informes que servirán de base a la decisión definitiva para este espacio, en el que también habrá que determinar la responsabilidad que tiene el Ayuntamiento y la concesionaria de esta infraestructura que ha actuado “con diligencia y rapidez”.


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Sobre las posibles causas de este hundimiento, entre las que se baraja la filtración de agua de los parterres, ha señalado que estará “sobre la mesa” en estas reuniones, si bien habrá que esperar a todos los informes para poder ser “más certeros”.