Cataluña promueve la ‘desconexión’ con el resto de España para el próximo día 1 de octubre. Sin embargo, el llamado ‘derecho a decidir’ no es solo pretensión de la Generalitat de Cataluña. Un pequeño pueblo de la comarca ‘Tierras altas», perteneciente a la provincia de Tarragona, ha enviado a través de su alcalde una petición oficial para buscar soluciones jurídicas que permitan la separación del municipio de Cataluña y su anexión a Aragón. El municipio ‘quijote’ es Batea, y quiere ser aragonés.

Según publica el diario El Mundo, el municipio está planteándose pedir ser territorio aragonés, y por ello, pedirán al subdelegado del Gobierno de España en Tarragona un informe que explore las fórmulas jurídicas para cambiarse de comunidad autónoma.

Batea podría ser un pueblo aragonés / Google Maps

«HARTOS DE DISCRIMINACIONES»

Según cuenta el alcalde al citado diario, desde hace más de 25 años se suceden «discriminaciones, agravios y encontronazos con el Govern«, y de esa manera, por el desprecio del gobierno catalán a Batea, la situación es límite. El alcalde reconoce que no se quieren ir, sino que les echan.


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El motivo por el que se sienten ofendidos por el trato que dispensa el Gobierno respecto a su pueblo, se centra en la construcción de una residencia de la tercera edad con 60 plazas concertadas. Sin embargo, el convenio firmado para poder ofertar esas plazas no está siendo cumplido por la Generalitat.

Batea está harta de «agravios y discriminaciones» / Batea

Según reconoce el alcalde de Batea, el Gobierno catalán «insiste en que no hay lista de espera, cuando estamos al límite en el pueblo«. Y tan solo, 7 años después de la construcción y la firma del convenio, se han ofertado 30 plazas.

Siempre según recoge el diario El Mundo, el alcalde reconoce que la situación es dantesca pero que no le extraña. «Llevo muchos años en política y durante las procesiones de fiestas he visto cómo los líderes convergentes cambian en los balcones las banderas españolas por las independentistas».