La consejera del Gobierno de Aragón Mayte Pérez ha defendido la función de la Corporación Aragonesa de Radio y Televisión (CARTV) como un «proyecto de éxito colectivo», frente a las críticas de VOX, que la ha tachado de «juguete caro».

En una comparecencia este jueves en el Pleno de las Cortes a petición de VOX para dar cuenta de la gestión económico-financiera, la consejera de Presidencia y Relaciones Institucionales ha señalado que, pese a la dispersión territorial, la CARTV es la segunda más barata por kilómetro cuadrado al que da servicio, con 985 euros, muy lejos de la media de la Federación de Organismos de Radio y Televisión Autonómicos (FORTA), que se eleva a los 2.536.


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Con solo 14 años de existencia, Aragón TV es una de las cadenas autonómicas más vistas, solo por detrás de la catalana y la vasca, con una trayectoria mucho más dilatada, ha destacado además la consejera.

Por coste por audiencia, la televisión es la más económica de las cadenas autonómicas, con 5,3 millones de euros de inversión por cada punto de audiencia, frente a los 15,8 que cuesta en regiones como Cataluña.

Pérez ha puesto sobre la mesa en su discurso la aportación del grupo al Producto Interior Bruto (PIB) de la Comunidad, ya que «por cada euro que se invierte, retornan dos euros«, debido a que más de 250 empresas y profesionales facturan a la CARTV.

En este sentido, la diputada ha manifestado que se ha reducido el plazo de pago a los proveedores, además de otros avances como eliminar el endeudamiento bancario a largo plazo y concluir 2018 y 2019 con un patrimonio neto positivo.

Finalmente, la consejera ha concluido que a VOX le «escalda» todo lo público, a la par que se ha preguntado cómo van a apoyar una radiotelevisión autonómica si cuestionan las Comunidades Autónomas.


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El diputado de VOX, David Arranz, se ha remitido a la legislación para señalar que debe prevalecer la autofinanciación y, solo como apoyo, la inyección de dinero público. Este año, ha criticado, la CARTV cuenta con un presupuesto de 50 millones de euros, la misma cantidad, ha comparado, que el dinero destinado al fomento de empleo.

Por ello, para él y para su grupo, la corporación pública es un «modelo insostenible y ruinoso» que es completamente dependiente de las subvenciones, ya que su financiación por venta de contenidos o publicidad es «mínima e inviable».

VOX SE QUEDA SÓLO

Pero VOX ha encontrado también la oposición del resto de los grupos parlamentarios, que han defendido en sus intervenciones que no se puede comparar un servicio público con los objetivos de una empresa privada.

Desde el PSOE, Darío Villagrasa ha criticado que VOX se vista de «auditor contable» para cuestionar la CARTV, algo en lo que ha coincidido el diputado de CHA, Joaquín Palacín, quien ha afeado que lo que no le gusta al grupo de Santiago Abascal es que sea «un servicio público que da voz al territorio».

Por su parte, el diputado del PAR, Jesús Guerrero, ha considerado que los aragoneses se sienten orgullosos de sus medios públicos, ya que son «plurales, sostenibles y cercanos». Para Nacho Escartín, de Podemos-Equo, VOX no entiende el servicio público que hacen estos medios de comunicación cuyos profesionales son «los primeros en llegar y los últimos en irse» de los 731 municipios aragoneses.

Desde Ciudadanos, Beatriz García ha señalado que esta corporación ofrece la única oferta hoy en día de contenido aragonés y que promueve el turismo, crea empleo y es el motor de la industria audiovisual en el territorio.


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«Si es pública no debe caber la precariedad«, ha juzgado Álvaro Sanz (IU), quien ha pedido que se apueste por la internalización de los servicios externalizados.

El tono más crítico ha llegado no obstante desde la bancada popular, con Mar Vaquero, quien ha recordado que CARTV debe gestionarse «con imparcialidad, pluralidad, veracidad, objetividad libertad, consenso y dialogo».