Más 700 años de historia, 16.000 cofrades, 4.000 tambores y bombos y 53 procesiones como la del Santo Entierro. Así es la Semana Santa de Zaragoza; una festividad religiosa peculiar conocida por el estruendo de sus instrumentos y que llena los hoteles de la capital aragonesa en estos días hasta el punto de que es la segunda fecha en mayor ocupación hotelera, solo por detrás de las Fiestas del Pilar.

Durante toda la semana, cofradías y hermandades sacan a la calle sus imágenes en una auténtica muestra de arte y devoción, llenando toda la ciudad de sonido y color. Las hay de todos los tipos y tamaños. Desde las que conservan las tradiciones aragonesas de siempre, hasta que las que se inspiran en la Semana Santa de Sevilla, o de las que apenas son unas decenas de personas, hasta las grandes cofradías conformadas por cientos y cientos de cofrades.

Entre las más grandes, destacan especialmente La Piedad, La Columna, las Siete Palabras y el Descendimiento. Verlas pasar es todo un espectáculo al contemplar una marea humana que llena de color calles y avenidas, acompañando a sus pasos y misterios en medio del sonar de bombos, tambores y timbales.

COFRADÍA DE LA PIEDAD

El Santo Cristo del Refugio, pasando junto a la Seo / La Piedad

La cofradía de la Piedad, creada en 1937, fue la primera cofradía penitencial de la ciudad, y en la actualidad tiene más de 1.400 hermanos según explican en su página web. Hasta el año de la creación de La Piedad, en la capital aragonesa no existían cofradías penitenciales tal y como las conocemos hoy. La Muy Ilustrísima, Antiquísima y Real Hermandad de la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo y Madre de Dios de Misericordia, más conocida como la Hermandad de la Sangre de Cristo, era la encargada desde siglos atrás de la organización de los actos de Semana Santa, organizando a los voluntarios y terceroles que sacaban los pasos a la calle.

En los años, por la tensión política que se vivía en el país, la procesión del Santo Entierro no había podido salir a la calle, por la falta de voluntarios y por el peligro que representaba salir a la calle con los pasos, ya que llegó a explotar una bomba al paso de la procesión. En el año 35 se consiguió sacar el Santo Entierro a la calle, y ese mismo año, varios años que participaron en esa procesión, decidieron crear La Piedad, una cofradía filial de la Sangre de Cristo.

Así, en 1937, en plena Guerra Civil española, se creó la Cofradía de Nuestra Señora de la Piedad. Ese mismo año, los primeros hermanos de la cofradía salen a la calle acompañando al paso de la Piedad en el Santo Entierro, vistiendo el mismo hábito que podemos ver en la actualidad, diseñado por el arquitecto Regino Borobio. El paso de la Piedad fue creado por Antonio Palao en 1871.

Al año siguiendo, un 15 de abril de 1938, La Piedad instauró otra tradición que se mantiene hasta este momento. La salida a las cero horas del Viernes Santo de su procesión titular, manteniendo invariables el día, la hora y el recorrido desde entonces: Iglesia de Santa Isabel, Manifestación, Alfonso I, Coso, Plaza de España, Don Jaime, Plaza de la Seo y calle del Sepulcro hasta la iglesia de San Nicolás.

En 1939 se instauró otra tradición; tras encerrar la procesión en San Nicolás, se iniciaba de madrugada un Vía Crucis por las calles del Boterón y la Magdalena. Desde el año 41, al nombre de la cofradía se le añade «y del Santo Sepulcro». Ese mismo año, el 30 de marzo, la Cofradía llegó a un acuerdo con la Santa y Real Hermandad de Nuestra Señora del Refugio y Piedad de Zaragoza, para poder portar en sus desfiles procesionales la imagen del Santo Cristo del Refugio, una talla de la escuela de Juan de Mesa que se venera en la Capilla de la Hermandad.

En el año 1.965 se crea la sección de instrumentos. En origen solo participaban 25 timbales, siendo la primera cofradía zaragozana que introdujo este instrumento en la Semana Santa. Actualmente esta sección está compuesta por más de 250 hermanos, que tocan tambores, bombos, timbales y cornetas.

La cofradía tiene otras dos características: la primera, es que tan solo está formada por hombres. Las mujeres, tan solo pueden salir como manolas acompañando a la imagen titular, La Piedad. Y la segunda, es que la cofradía tiene el privilegio de liberar un preso.

COFRADÍA DE LAS SIETE PALABRAS

Semana Santa Zaragoza
Esta cofradía fue fundada en 1940 / Sergio Martín – Las Siete Palabras

La cofradía de las Siete Palabras y San Juan Evangelista fue creada en 1940 por la Juventud masculina de Acción Católica, siguiendo la estela marcada por La Piedad. Con más de 1.400 cofrades, es la cofradía más numerosa de cuantas desfilan por las calles de Zaragoza. Con hábito blanco y capirote verde, esta cofradía fue la primera en introducir los tambores en su primera salida el Viernes Santo del mismo año en que fue creada.

En 1945 incorporaron los timbales, y en 1970 los bombos del Bajo Aragón, y en 1985, las timbaletas. En 1941 introdujeron las cornetas, y en 1945 la trompeta heráldica. La Cofradía introdujo los tambores tradicionales del Bajo Aragón en 1941, creando así la primera sección de instrumentos de la Semana Santa de Zaragoza. Posteriormente se incorporarían otros instrumentos de percusión como los timbales (en 1945), los bombos calandinos (1970) y las timbaletas (en 1985).

Además, también se tocan instrumentos de viento-metal, como una trompeta heráldica (incorporada en 1945), y cornetas (la primera datada de 1941 y posteriormente incluidas en el “Piquete de Honor” en 1990).

La cofradía sale a la calle acompañando un total de tres pasos: la Tercera Palabra realizada por Félix Burriel en 1948, la Quinta Palabra obra de Franciso Liza en 1889, y la Séptima Palabra, creada por los talleres de Jesús Fernández Juan.

COFRADÍA DE LA COLUMNA

Semana Santa Zaragpza
Marea roja y blanca en la Plaza del Pilar / La Columna

La Real, Pontificia, Antiquísima, Ilustre, Franciscana y Penitencial Hermandad y Cofradía del Señor Atado a la Columna y de Ntra. Sra. de la Fraternidad en el Mayor Dolor, conocida popularmente como La Columna, está formada según informan en su página web por más de 1.300 hermanos, de los que procesionan aproximadamente unos 700, de los que más de 400 son instrumentos. Al anochecer de la tarde de Jueves Santo, y tras abrirse las puertas de la iglesia de Santiago, una marea blanca y roja inunda las calles del centro de Zaragoza acompañando a los cinco pasos de esta cofradía zaragozana.

La creación de esta cofradía tuvo lugar en el año 1940, aunque su historia se remonta a 1804, año del que datan los estatutos de la Antiquísima Hermandad del Santísimo Christo Atado a la Columna, constituida para venerar una pequeña imagen del Señor Atado a la Columna. situada en el convento de las Madres Dominicas de Santa Fe.

La cofradía saca a la calle un total de cinco pasos. El primero de ellos, conocido entre los hermanos de esta hermandad como el Cristín por su reducido tamaño, es una preciosa talla de Cristo Atado a la Columna que fue la que dio origen a la hermandad en 1804. Es llevada a hombres por ocho porteadores, y procesiona desde 1981.

El paso titular, Jesús Atado a la Columna, es un paso de grandes dimensiones que es uno de los más espectaculares de la Semana Santa zaragozana. Fue creado por el escultor aragonés José Bueno en 1949. La cofradía también saca a la calle el paso de Nuestra Señora de la Fraternidad en el Mayor Dolor, una Virgen bajo palio de estilo andaluz, y dos pasos: la Flagelación, un paso del imaginero murciano José Antonio Hernández estrenado en 1991 y que consta de cuatro figuras, y el más reciente, Jesús es condenado a los azotes. Este paso, realizado por Manuel Martín en 2019, representa a Pilatos, a su mujer y a un sayón que está atando a Jesús.

EL DESCENDIMIENTO

Semana Santa Zaragoza
Nuestra Señora de las Lágrimas, en el Coso / El Descendimiento

La cofradía del Descendimiento y Lágrimas de Nuestra Señora es una de las cofradías más antiguas, y a la vez, de las más numerosas, con más de 1.200 miembros, según su página web. Además, es una de las cofradías que más rápido han crecido en los últimos años. Especialmente, teniendo en cuenta que en los años 70 la cofradía estuvo a punto de desaparecer.

El Descendimiento tiene su origen en la Real Congregación de la Anunciación y San Luis Gonzaga, creada en 1860. En su seno se fraguó la fundación de la cofradía en 1939 como filial de la Sangre de Cristo. El 22 de marzo de 1940 se celebró la primera salida procesional participando en la Procesión del Santo Entierro, el Viernes Santo.

En 1941, además de participar en la Procesión del Santo Entierro, tuvo lugar la primera salida como Procesión del Descendimiento. Esta procesión se llevó a cabo el Martes Santo, hasta que en 1963 se trasladó al Jueves Santo por causas laborales y ante la coincidencia con la época de exámenes en el colegio. El recorrido de esta primera procesión titular fue: Iglesia de la Magdalena, Coso, Alfonso, Manifestación, finalizando en la Iglesia de Santa Isabel.

La procesión partió en sus dos primeros años de la Iglesia de Santa María Magdalena, y es en 1943 cuando tanto la Congregación como la Cofradía eligen como sede canónica, la Iglesia del Sagrado Corazón. En el año 51 procesionaría por primera vez La Virgen de las Lágrimas en la procesión del Descendimiento, y en 1968, esta talla saldría también en la procesión del Santo Entierro.

Desde que nació la cofradía, en las procesiones participaban bandas de música militares o de distintas instituciones. Y en 1959 se creó la sección de instrumentos, que saldría a la calle por primera vez en 1962, con diez tambores y dos timbales. No sería hasta 1975 cuando el bombo se incorporó a la sección.

En 1972 se planteó la creación de una nueva procesión el Martes Santo. Saliendo desde el Colegio del Salvador, lugar donde se guarda la imagen de la Virgen de las Lágrimas. A esta procesión se le llamó Procesión de las Lágrimas y durante el recorrido se realizaron cinco predicaciones acompañadas cada una de ellas por jotas aragonesas con letras alusivas a la Virgen. Las primeras letras de las jotas fueron compuestas por el padre Cavero, SJ. Y esa nueva tradición de cantar jotas durante la procesión pronto fue imitada por otras cofradías zaragozanas.

En los años 70 se produjo otro importante hito, al permitir que las mujeres pudieran ser cofrades de hábito. Desde 1988, y tras la clausura de la iglesia del Sagrado Corazón, la procesión de las Lágrimas encierra en la iglesia de San Cayetano. Este templo es también origen y fin de la procesión del Descendimiento, el Jueves Santo.

Desde el año 2007, se saca la imagen del Santo Cristo de la Buena Muerte –propiedad de la Cofradía desde 1997– con una peana en el Vía Crucis del Viernes de Dolores por el exterior del Colegio del Salvador.