Para ahorrar en la factura del gas, las ventanas y persianas juegan un papel fundamental. Dependiendo de los materiales y del tipo de persiana y ventana que tengamos instaladas, serán más efectivas o menos en el ahorro energético.
En este artículo te explicaremos en qué es necesario fijarse a la hora de instalar una persiana o una ventana para ahorrar en la factura eléctrica.
¿CUÁL ES LA MEJOR VENTANA PARA AHORRAR LUZ Y GAS?
Tener un buen sistema aislante en nuestras ventanas instalado en nuestra vivienda significará un gran ahorro en la factura del gas. Por el hueco de las ventanas, puede salir y entrar el frío y el calor con facilidad.
En invierno sí tenemos la calefacción puesta y unas ventanas antiguas, para sentir una temperatura agradable, tendremos que subir la calefacción ya que el frío se notará más en el interior de la vivienda.
Y de la misma forma, pasará en verano cuando el frio producido por el aire acondicionado pase a través de la ventana y no permanezca en el interior de la vivienda.
Por esta razón, una correcta instalación de un sistema de aislamiento de ventanas, es la mejor solución para mantener una temperatura interior correcta.
Como materiales aislantes, el aluminio no entraría dentro de los mejores materiales aislantes, salvo que se instale una rotura del puente térmico que evitaría esa pérdida de temperatura.
El PVC y la madera serían de los mejores para trabajar como aislamiento térmico. Pero también es importante prestar atención al cristal. Para saber si estas eligiendo la ventana correcta nos fijaremos en las etiquetas de ahorro energético.
En estas etiquetas mostrarán el ahorro de energía que supone su instalación. En la etiqueta, se verán dos gráficas: una de verano y otra de invierno. En la gráfica de invierno hay 7 niveles de la letra “A” a la “G”. La letra A se considerará la mejor en cuanto a ahorro energético mientras que la letra G denotará la baja calidad en cuanto a ahorro energético.
En cuanto a la gráfica de verano, la medición es a partir de estrellas, 3 estrellas sería el máximo ahorro energético mientras que una estrella sería la peor calificación.
¿CUÁL ES LA MEJOR PERSIANA PARA EL AHORRO ENERGÉTICO?
Los puentes térmicos producen fugas de calor en los meses de invierno cuando necesitamos que la casa se mantenga caliente y de frío en verano cuando buscamos lo contrario y entra el aire caliente en nuestra vivienda. Esto es lo que genera un gasto eléctrico elevado.
Un estudio del IDEA (Instituto de Diversificación y Ahorro de la Energía) ha demostrado que hasta un 30% de la energía que consumimos es debido a las fugas de temperatura de nuestras ventanas.
Para conseguir un aislamiento térmico completo, además de la instalación de ventanas aislantes, también deberemos considerar la instalación de persianas sobre todo, si en verano notamos la presencia del calor en nuestra vivienda.
Un estudio ha demostrado que se puede evitar un 50% de la fuga de calor gracias a la instalación de las persianas correctas. En el mercado existen ya modelos que protegen de la radiación solar y otras que tienen un sistema de aislamiento acústico.
Las persianas se utilizan mucho más en verano para evitar el calor excesivo en el interior de la vivienda y regular la luz que entra. En invierno tendremos que dejar la persiana subida cuando haga sol y que actúe como un calefactor más en nuestra vivienda. Sin embargo, por la noche, se recomienda bajar la persiana para evitar que entre el frío.
Las persianas deberán cuidar todos sus elementos, partiendo de la lama, el cajón y el motor de la persiana. Los modelos de persianas enrollables y orientables son los más indicados ya que permiten regular la luz y la persiana de forma muy sencilla.
Se recomienda instalar las persianas en el exterior, para que actúen como barrera entre la calle y el interior de la vivienda.
De esta forma, con el sistema correcto de persianas y ventanas aislantes, podremos reducir el consumo de calefacción y de aire acondicionado. Es muy importante que los modelos de persianas y ventanas sean de calidad y cumplan con los requisitos de ahorro energético.