Otra agresión en la prisión de Zuera (Zaragoza) casi deja ciego a un funcionario. Andrés I, un preso con antecedentes por hurto, robos y lesiones leves, no tenía conflictos previos y estaba a punto de ser trasladado a una prisión de Valencia. «A los primeros grados los mueven de prisión porque eso reduce los problemas», explica una fuente cercana a los hechos a HOY ARAGÓN. Entraron dos funcionarios a su celda este viernes; iban a preparar su conducción, a acompañarle mientras recogía sus enseres. De pronto, sin motivo aparente, agredió a los funcionarios. «Fue una situación muy tensa e inesperada. Uno de los funcionarios tenía la cara hinchada por un golpe y tuvo que venir una ambulancia a llevárselo al hospital, algo muy inusual», explica la fuente consultada por este diario digital.

«¡No veo de un ojo!». Contaba a sus compañeros un funcionario de la prisión zaragozana después de ser agredido. Con la cara hinchada, llegó a perder el conocimiento y fue trasladado a la enfermería hasta la llegada de la ambulancia. Tras una evaluación médica, este diario ha podido saber que el funcionario se encuentra bien y estable, y ha podido recuperar la visión del ojo. El otro compañero tuvo que recibir dos puntos en el codo después de recibir varios golpes y ser agredido con insistencia y sin mediar palabra. Una nueva agresión que denuncia ‘Tu Abandono Me Puede Matar’, la Asociación Profesional de Trabajadores Penitenciarios. 

Otro de los problemas a los que se enfrentan a diario en módulos conflictivos, como es el módulo 3 en la cárcel de Zuera, son los constantes intentos autolíticos de presos del norte de África, fundamentalmente marroquíes y argelinos. «Se chinan -cortan- constantemente en muñecas y tobillos», explica una fuente cercana a HOY ARAGÓN.