Es tan difícil de entender que muchos no acabamos de creérnoslo”, dice uno de los vecinos que acude habitualmente a las caceroladas de los miércoles para protestar por la ‘okupación’ ilegal en su pueblo.


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Hace tan solo dos días la Guardia Civil detenía a tres personas acusándolas de pertenencia a un  grupo criminal y autores de amenazas de muerte a vecinos y robos en la zona. Los investigadores policiales los presentaron ante el juez como miembros activos de una red de venta de llaves de pisos vacíos por 500 euros.

Tras dicha operación permanecieron 48 horas retenidos y posteriormente dicho magistrado, titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Zaragoza los dejaba en libertad.

VUELVEN A ‘OKUPAR’ EN LA MISMA CALLE

Hoy hemos conocido un nuevo capítulo de esta historia que nos han trasladado los propios vecinos y HOY ARAGÓN ha podido confirmar por otras fuentes. Ayer los ‘okupas’ detenidos y posteriormente puestos en libertad fueron a recoger sus pertenencias acompañados por la Guardia Civil y lejos de marcharse pasaron todo a otro piso en la misma calle.

“La policía les sacó del portal número cuatro de la calle y se han metido en otro piso en el portal seis, a tan solo unos metros. Así que seguimos igual”, explica unos de los vecinos afectados.

Esa misma noche uno de los detenidos salía al balcón de su ‘nueva vivienda’ asomándose sin problemas y confirmando lo que muchos habían contemplado desde la calle. “Deberíamos darle una vuelta a cómo está la justicia en este país. Les echan de uno y entran en otro ¿No te parece todo esto una auténtica vergüenza?”, relata César, uno de los organizadores de las protestas vecinales.


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A pesar de esta situación que muchos no acaban de creerse los afectados creen que los ‘okupas’ no tardarán en marcharse por la presión policial y vecinal a la que están siendo sometidos.”A pesar de toda esta situación creemos que no tardarán en marcharse. Todos pensamos que ya estamos más cerca de un final feliz”, asegura César