«La gente salía gritando, sin saber qué estaba sucediendo», explicaba un vecino esta mañana. El edificio afectado, en la Calle Miguel de Ara, número 5, ya había tenido algún problema estructural y había tenido que ser apuntalado con vigas provisionales.
A estas deficiencias hay que añadir un grave incendio que esta pasada madrugada afectaba a dos de las tres plantas del edificio, y al tejado. Los bomberos han estado trabajando más de tres horas intentando sofocar las llamas.
En el transcurso de esta intervención, uno de ellos ha resultado herido por inhalación de humos y por quemaduras en el hombro. Ninguno de los vecinos desalojados ha resultado heridos y todos han salido por su propio pie. Se da la circunstancia que los bomberos han tenido que rescatar a un perro que se había quedado atrapado por las llamas.
A esta hora, responsables del Ayuntamiento de Zaragoza están valorando la situación, mientras los vecinos esperan en la calle, sin apenas haber dormido en toda la noche, para ver si pueden volver a alguna de las viviendas o recuperar algo de sus enseres.
Asímismo, se están investigando las causas de este incendio que ha dejado, como explican los propios vecinos, el edificio muy dañado.
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