La ola de nuevos restaurantes no para de crecer en la ciudad de Zaragoza. Tanto, que no da tiempo de acercarse a todas las propuestas que se extienden por toda la ciudad, con locales para todos los gustos. Desde hamburgueserías a propuestas de gastronomía andaluza como La Casa de la Marimorena.

Hoy, nos vamos hasta la calle Baltasar Gracián para conocer Gozar. Un nuevo restaurante que hace homenaje a su nombre con una cocina rica en la que los productos locales y de temporada, junto a las recetas de aprovechamiento son los protagonistas absolutos o las verduras ecológicas.

Tras Gozar está Chelis Navarro, un reconocido y laureado Dj que se ha metido en el mundo de la cocina acompañado de un equipo en el que hay cocineros y hosteleros como Arturo Tolosana, Jorge Gil y Alfonso Mimbela, además de Pablo Soler, un chef que ha trabajado en algunos de los mejores restaurantes del mundo (entre ellos, el Noma de Copenhague) y que ha ejercido de asesor gastronómico para confeccionar la carta de Gozar.

Una carta que por cierto, no incluye productos de quinta gama. Todo lo que se puede comer y pedir se elabora en los fogones de este restaurante. Y eso, se nota en el resultado de las propuestas que aparecen en la carta.

«La filosofía de Gozar va implícita en su nombre: «queremos que la gente disfrute con una cocina de producto y de aprovechamiento, despertando la curiosidad para probar sabores o bebidas nuevas», explica Chelis a HOY ARAGÓN.

QUÉ COMER EN GOZAR

Pencas de acelga sobre praliné de pistachos, o entrañas con puré de patata robuchon / Gozar

Entre todas las propuestas, y aunque han abierto hace poco, en la carta ya empiezan a despuntar algunos platos. Entre ellos, el escabeche de pollo, las patatas bravas, la ensaladilla de gamba blanca y huevos de trucha del Pirineo, o las gambas rojas desordenadas con hinojo, limón y hojas de rabanitos.

También están entre los más pedidos el panecillo de Viena de carrillera, chocolate y encurtidos, o la entraña de puré de patata y salsa de oporto, o la entraña con puré de patatas estilo robuchon. Para almorzar, los protagonistas de las mañanas son los huevos fritos de gallinas libres.

Entre las propuestas, destacan las recetas de reaprovechamiento, un tema muy de moda en esta época en la que la sostenibilidad y el aprovechamiento de los recursos es clave para combatir el cambio climático. En este sentido, además de las croquetas que siguen la receta de la madre de Chelis, hay sugerencias como las ya mencionadas papas bravas. Pero son unas papas muy especiales, ya que para elaborar la salsa americana que las acompañan, los cocineros de Gozar utilizan las cabezas de las gambas que utilizan en otros platos.

Esa sostenibilidad al aprovechar la comida también se ve en el agua de cortesía que sirven; agua filtrada en el propio lugar, para evitar la generación de residuos innecesarios. Para acabar, en carta también tenemos postres, que van cambiando dependiendo de la temporada. En este sentido, si hasta ahora han tenido fresas con nata, las cerezas ecológicas de Bolea se están estrenando en este momento. Y en breve, la carta se ampliará con postres como el flan o la tarta de chocolate.

Los encurtidos que se ponen acompañando a la primera consumición merecen mención aparte, ya que son elaborados allí mismo, y se van renovando conforme cambian los productos de temporada. Ahora por ejemplo sirven rabanitos y borrajas, y están preparando ya la zanahoria encurtida que servirán próximamente.

COCINA ABIERTA TODO EL DÍA

Gozar Bar
En Gozar hay una amplia oferta de vinos de distintas procedencias / Daniel Surutusa

Por otro lado, en Gozar quieren que gocemos, valga la redundancia, de la buena comida a cualquier hora. Y por eso, hay cocina abierta todo el día, con una parte de la carta disponible para esas personas que disfrutan del tardeo, y a las que les entra algo de hambre. Entre esas propuestas para pedir en cualquier momento, hay sugerencias como tablas de queso variados, buñuelos, anchoas en salmuera, o ensaladilla o las patatas bravas.

Junto a la comida, en este restaurante tienen muy claro que la bebida también es muy importante para que la experiencia sea gozosa. Por eso, tienen una amplia oferta de vinos de distinta procedencia. Desde vinos aragoneses, a vinos españoles e internacionales. «La idea es tener una carta con referencias especiales para chateo o copeo, con vinos que no son tan habituales. Así la gente puede descubrir vinos de otras denominaciones, y damos visibilidad a muy buenos vinos, sin tener que ir a un restaurante de alto nivel para probarlos», explica Cheli a este diario.

También destaca la presencia de bebidas espirituosas, con una barra repleta de whiskys, vodkas o ginebras, y con ideas tan atractivas como pacharanes picantes, o mezcales ahumados, cítricos o florales.