La Confederación Hidrográfica del Ebro ha remitido un escrito a numerosos ayuntamientos de la cuenca y a todas las diputaciones provinciales recomendado que, ante el escenario de escasez de agua en el que se encuentra la cuenca, los municipios valoren su situación respecto al abastecimiento. La descripción del estado general de sequía y escasez la viene realizando cada mes el organismo de cuenca mediante el informe de indicadores de sequía y escasez que se publica en su página web.

En general, «se ha detectado un progresivo deterioro», lo que «motiva la necesidad de que las administraciones locales pongan en marcha estrategias para hacer frente a un verano que puede ser complicado en algunas zonas. Algunos sistemas de abastecimiento ya las han comenzado a aplicar», ha señalado la CHE en una nota de prensa.

Cada ayuntamiento es conocedor de la situación en la que se encuentra, de las previsiones a futuro y de las medidas que ha de tomar. La Confederación recomienda a cada ayuntamiento que, a partir de la valoración de su situación, «realice una adopción temprana de medidas».

La Confederación ha explicado que «estas medidas pueden ser, entre otras, de concienciación a la población para hacer un uso responsable del agua, de ahorro en el uso del agua de boca u otros usos de agua dependientes del abastecimiento municipal y, en su caso, de restricciones para asegurar el suministro en un año que se prevé complicado».

Además, se ha informado de que el Plan Especial de Sequía de la cuenca del Ebro está revisándose en estos momentos. Se ha iniciado su consulta pública a partir de la publicación en el BOE del 30 de marzo de 2023. El plazo es de 3 meses, finalizando el 30 de junio de 2023. La CHE admite cualquier sugerencia de mejora que permita lograr entre todos el mayor acierto en la gestión de un recurso tan valioso como es el agua.